WASHINGTON.- El estudiante Cho Seung Hui, quien hace una semana disparó más de 100 veces cuando mató a 32 personas en la Universidad Politécnica de Virginia, no presentaba anormalidades cerebrales, informaron los médicos forenses.
William Massello, médico forense en Roanoke, en el suroeste de Virginia donde ocurrió la matanza, dijo que los patólogos enviaron muestras de sangre para determinar si Cho, de 23 años, había ingerido drogas antes de su ataque.
Masello sostuvo que el joven surcoreano no fue particularmente certero con sus disparos, pero baleó repetidas veces a sus víctimas, muchas de las cuales presentaban heridas en las manos o los brazos, que muestran que trataron de defenderse.
Según el médico forense, algunas de las víctimas recibieron un balazo y otras varios disparos. "Hay algunas que recibieron dos, tres, cuatro, quizá hasta seis disparos", dijo.
"No encontré anormalidades en el cerebro, en un examen patológico inicial", afirmó Masello tras completar su examen de Cho.
"Habrá exámenes de tejido microscópicos pero yo no espero que se encuentren anormalidades", agregó.
El joven surcoreano mató a dos personas en un dormitorio, fue hasta una oficina de correos desde donde remitió un paquete con fotografías y videos a una cadena de televisión, e irrumpió en un edificio de salas de clases donde dio muerte a otras 30 personas. Luego se suicidó disparándose en la cabeza, después de cometer la mayor matanza de Estados Unidos en un centro escolar.
Los investigadores han encontrado indicios de que Cho adquirió el 22 de marzo dos cargadores vacíos en un sitio de comercio por internet. Los cargadores son adecuados para uno de los dos tipos de armas que Cho usó en su ataque.