HAMBURGO/COLONIA.- En el universo hay al menos 100.000 millones de galaxias. ¿Puede ser la Tierra el único planeta habitado? La astrobióloga alemana Gerda Horneck cree que no. "Nuestro sistema solar es muy normal, y en vista de que hay quizás 10.000 millones de sistemas solares en nuestra galaxia e innumerables en las otras, creo que es presumir demasiado el pensar que la vida en la Tierra es única".
Horneck, que trabaja en el Centro Alemán de Navegación Aérea y Espacial (DLR), advierte sin embargo que "estamos en el principio de la búsqueda de vida fuera de la Tierra".
Estos intentos dieron un importante paso con el anuncio de ayer del descubrimiento del primer planeta habitable fuera de nuestro sistema solar. "En un mapa del tesoro del universo, existe la tentación de marcar este planeta con una enorme cruz", afirma Xavier Delfosse, de la Universidad de Grenoble y uno de los responsables del descubrimiento, hecho gracias a la tecnología del observatorio chileno "La Silla", situado en la IV Región, perteneciente a la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO).
Este planeta, detectado pero aún no observado, es una vez y media mayor que la Tierra, gira en torno a una estrella y en él podría haber agua líquida, una condición central para la vida tal como la conocemos. Sin embargo, por ahora los científicos no han encontrado indicios de agua o vida allí.
La búsqueda en el universo no se centra en civilizaciones extrañas, sino en cualquier forma de vida actual o pasada. La mirada se dirige en primer lugar a nuestros vecinos, según Horneck, como Marte o a las lunas de Saturno o Júpiter. "Pero en nuestro sistema solar no hay que ser muy optimistas", asegura.
Por eso se busca cada vez más fuera del Sistema Solar, algo que es "tremendamente excitante".
Muy, muy lejos
Hasta el momento es técnicamente muy difícil hallar planetas del tamaño de la Tierra en torno a otras estrellas, debido a las enormes distancias. El nuevo planeta se encuentra relativamente cerca y, sin embargo, nos separan inimaginables 200 billones de kilómetros.
Además, no es posible verlo ni siquiera con los mejores telescopios. Fue detectado gracias la fuerza de gravedad que lo mantiene en órbita alrededor de su estrella.
Los científicos depositan esperanzas en las misiones de satélites. En diciembre pasado fue lanzado el "cazador de planetas" francés "Corot" y desde febrero investiga a los planetas exógenos.
En los últimos 12 años se han encontrado 230 planetas extrasolares y hace poco un científico estadounidense probó la existencia de agua en la atmósfera de uno de ellos. Sin embargo, el gaseoso HD 209458b, en la galaxia de Pegaso, no es considerado habitable.
Condiciones para la vida
Según Horneck, la vida requiere tres condiciones centrales: además de agua en estado líquido, una fuente de energía -puede ser la estrella pero también una fuente química como en el caso de los microbios subterráneos en la Tierra- y carbono.
"Estamos bastante seguros de que la vida tiene que basarse en una química del carbono", afirma la experta. El carbono es ideal para todos los procesos vitales. Las moléculas complejas del carbono, las partículas básicas de la vida, se forman también de manera variada en el cosmos no habitado.
Otras misiones de las que se esperan más datos con las flotas de satélites "Darwin", de la Agencia Espacial Europea (ESA), así como el "Terrestrial Planet Finder", de la NASA.
"Una señal relativamente fácil de encontrar es la presencia de ozono", explica Horneck, pues el gas está formado por oxígeno, que sólo puede ser creado por formas de vida.
El hallazgo de cualquier forma de vida implicaría un enorme avance en la teoría sobre su surgimiento, subraya esta astrobióloga. "Y por eso la buscamos tanto. No sólo para responder a la pregunta de si estamos solos".