BAGDAD.- Cinco soldados estadounidenses murieron en diferentes ataques este fin de semana, elevando a más de 100 la cantidad de militares fallecidos en lo que va del mes, hasta ahora el más mortífero del año, dijo el lunes el ejército.
Uno de los atentados fue con una bomba colocada en una carretera de Bagdad, donde los militares extranjeros y locales implementan un fuerte operativo de seguridad.
En otros hechos de violencia, un atacante suicida que aparentemente apuntaba a un convoy del ministerio del interior estrelló su vehículo cargado de explosivos contra un puesto de control iraquí cerca de una concurrida plaza del área de Hartiya, una zona de mayoría suní del oeste de Bagdad, matando a cuatro personas y lesionando a otras 10, expresó la policía.
La violencia tuvo lugar a pesar de una serie de medidas implementadas como parte del operativo de seguridad, que va por su semana número 11.
Por otra parte Irán aceptó participar en una conferencia multinacional sobre Irak de esta semana, que incluirá a Estados Unidos, incrementando las esperanzas de que el gobierno de Teherán ayude a frenar el flujo de armas y bombas en la frontera.
A comienzos de mes, el portavoz militar estadounidense mayor general William Caldwell expresó que integrantes de la inteligencia iraní habían entrenado a combatientes iraquíes en Irán para que aprendieran a utilizar y ensamblar bombas letales que se colocan en carreteras, conocidas como EFP, y otros artefactos explosivos. Dijo que el apoyo iraní se extendía a los suníes y chiíes en Irak.
Dos de los ataques contra los soldados estadounidenses sucedieron en la zona oriental de Bagdad, un área de mayoría chií donde las fuerzas extranjeras e iraquíes han incrementado sus actividades como parte de un operativo de seguridad que comenzó el 14 de febrero.
En el ataque con una bomba colocada en una carretera de Bagdad, murieron tres soldados y otro resultó herido. Los militares patrullaban una zona del este de Bagdad el domingo cuando fueron atacados, informó el ejército sin aportar otros detalles.
Otro soldado falleció en un ataque con armas pequeñas en el este de Bagdad el sábado, y un infante de la marina también murió en la provincia de Anbar, un fuerte de la insurgencia suní ubicado al oeste de la capital.
Así, se incrementó a por lo menos 104 la cantidad de soldados estadounidenses muertos en Irak en abril, convirtiéndolo en el mes más letal desde diciembre, cuando fallecieron 112.
Al menos 3.351 miembros del ejército norteamericano han muerto desde que comenzó la guerra, de acuerdo con un conteo de la AP.
Abril también ha sido el mes más letal para las fuerzas británicas desde el primer mes de la guerra. La cantidad de 11 soldados muertos reportada este mes sólo es superada por los 27 que fallecieron en marzo del 2003, reflejando el incremento de la violencia en el sur del país, donde están apostados los soldados británicos.
