WASHINGTON.- Deborah Jeane Palfrey, la Madame que está acusada de operar una red de prostitución en Estados Unidos, dio detalles sobre su presunto negocio ilegal en una entrevista con la televisión difundida anoche. Sin embargo, la mujer no identificó a nuevos clientes de importancia.
Palfrey proporcionó a la cadena ABC un legajo de 23 kilos de registros telefónicos pertenecientes a su servicio de acompañantes Pamela Martin y Asociados, con la esperanza de que su investigación pusiera al descubierto a varios clientes, quienes testificarían que no tuvieron relaciones sexuales con las empleadas de la acusada.
Algunos registros telefónicos pudieron ser rastreados hasta importantes ejecutivos empresariales, funcionarios de la NASA, al menos cinco oficiales militares y mansiones en vecindarios exclusivos, de acuerdo con el reporte de la ABC.
Pero no había miembros del Congreso ni funcionarios de la Casa Blanca, según los resultados del seguimiento de los contactos telefónicos de Palfrey, informó la cadena.
Palfrey, de 51 años y residente en Vallejo, California, está acusada ante un tribunal federal de extorsión y "lavado" de dinero proveniente de la prostitución. La acusada señala que administraba la empresa desde la lavandería de su casa y que las mujeres que trabajaban para ella firmaron contratos en los que prometieron no tener sexo con los clientes.
"No eran una cualquiera, sino mujeres muy bonitas que sólo necesitaban ganar unos dólares más", dijo Palfrey.
La mujer identificó a una de sus acompañantes, ex profesora universitaria que se suicidó después de ser acusada de prostitución. Asimismo, sostuvo que su negocio era legal.
"Yo vendía una fantasía sexual", afirmó.
Quizás, el cliente más prominente del negocio era el funcionario del Departamento de Estado Randall Tobias, quien renunció a su cargo la semana pasada luego que la ABC le preguntó si había recurrido al servicio.
Tobias dirigió los programas internacionales del gobierno federal para la atención del sida, que promueven la abstinencia y requieren que quienes reciben ayuda firmen un documento en el que se oponen a la prostitución.
Tobias dijo que recibió masajes pero negó haber tenido relaciones sexuales con las acompañantes.