APARECIDA.- El Papa Benedicto XVI exhortó hoy a los miembros del clero de América Latina y el Caribe a mantenerse unidos para preservar la fe católica, que consideró como el "patrimonio más valioso" de la Iglesia en la región.
"Ésta es la fe que hizo de Latinoamérica el Continente de la Esperanza. No es una ideología política, ni un movimiento social, como tampoco un sistema económico; es la fe en Dios Amor", expresó el Pontífice, durante la misa campal celebrada en el santuario de Aparecida, donde inaugurará hoy la V Conferencia del Episcopado de América Latina y el Caribe.
En la misa que inició el programa de su último día de visita a Brasil, el Papa aludió a las divergencias entre los que abogan por una prioridad a la acción social y los que defienden el énfasis en la salvación individual.
"Los jefes de la Iglesia discuten y se enfrentan, pero siempre en actitud de religiosa escucha de la Palabra de Cristo en el Espíritu Santo. Éste es el método por el que actuamos en la Iglesia, tanto en las pequeñas como en las grandes asambleas", afirmó.
En su homilía, realizada ante cientos de miles de fieles de Brasil y de varios países latinoamericanos Benedicto XVI dijo que la celebración litúrgica realizada en el principal centro de peregrinación católica del continente "constituye el fundamento más sólido de la V Conferencia".
"Sólo la caridad de Cristo, emanada por el Espíritu Santo, puede hacer de esta reunión un auténtico acontecimiento eclesial, un momento de gracia para este continente y para todo el mundo", afirmó.
En la parte de la homilía pronunciada en español, Benedicto XVI recordó el llamamiento a una "nueva evangelización" en América Latina hecho por su Juan Pablo II, y concluyó: "Yo os lo confirmo y, con palabras de esta V Conferencia, os digo: sed discípulos fieles, para ser misioneros valientes y eficaces".
Según el Joseph Ratzinger, la Iglesia "no hace proselitismo", sino que "crece mucho más por atracción: como Cristo 'atrae a todos hacia sí' con la fuerza de su amor (...) Así la Iglesia cumple su misión en la medida que, asociada a Cristo, cumple su obra conformándose en su espíritu y concretamente con la caridad de su Señor".
Aseguró, al mismo tiempo, que ese principio "no debe ser motivo de evasión de la realidad histórica en que vive la Iglesia compartiendo las alegrías y las esperanzas, los dolores y las angustias de la humanidad contemporánea, especialmente de los más pobres y de los que sufren".
Pese a la masiva presencia de fieles, el público presente en la última misa celebrada por el Papa en su primera visita a Brasil fue menos de la mitad de lo esperado. Según estimaciones de las fuerzas de seguridad, la plaza delante de la Catedral Basílica recibió hoy a entre 150.000 y 200.000 personas, menos de la mitad de las 500.000 esperadas inicialmente.