BAGDAD.- Las tropas estadounidenses continuaban rastreando el lunes una zona peligrosa al sur de Bagdad para tratar de ubicar a tres de sus camaradas desaparecidos y que la rama iraquí de Al Qaeda afirmó haber secuestrado.
En la noche del viernes, una patrulla de siete soldados estadounidenses y un intérprete iraquí fue atacada a 20 km al oeste de Mahmudiyah, al sur de Bagdad.
Cuatro soldados y el iraquí fueron muertos y los tres otros están desparecidos después del ataque.
El Estado islámico en Irak, alianza de grupos sunitas bajo control de la rama iraquí de Al Qaeda, reivindicó el secuestro, el domingo en un comunicado.
"Utilizamos todos los medios disponibles, incluso los satélites", para ubicarlos, declaró el portavoz del ejército norteamericano, teniente coronel Christopher Garver.
La búsqueda, en la que participan 4.000 norteamericanos, se concentra en el "triángulo de la muerte", entre las ciudades de Yussufiya, Mahmudiya y Latifiya, al sur de Bagdad.
En esta zona, los insurgentes sunitas, particularmente bien implantados, hacen reinar el terror y atacan regularmente a los civiles chiitas y a las fuerzas iraquíes y estadounidenses.
El Estado islámico en Irak prometió dar detalles sobre la emboscada, contra "una patrulla de cruzados".
El viceprimer ministro iraquí Barham Saleh, en viaje a Washington , no descartó que el ataque pudiese haber sido efectuado por Al-Qaida y anunció que soldados iraquíes participaban en la búsqueda de los soldados desaparecidos.
No es la primera vez que Al-Qaida reivindica el secuestro de soldados estadounidenses: en junio de 2006, dos soldados de la 101 división aerotransportada fueron secuestrados por hombres armados en un retén cerca de Yussufiya, siempre dentro del "triángulo de la muerte".
Sus cuerpos mutilados fueron ubicados el 20 de junio y su muerte fue presentada por Al-Qaida como una operación de represalia, después de la violación de una adolescente iraquí y el asesinato de su familia por soldados pertenecientes a la misma unidad.
Por otra parte, la violencia continuó el lunes en Irak, un día después de un atentado suicida reivindicado por el Estado islámico, que dejó 50 muertos en Majmur, a 300 km de Bagdad, al norte de Irak.
Tres policías murieron a manos de hombres armados en Baaquba ( 60 km al norte de Bagdad ), indicó la policía de la ciudad, capital de la provincia de Diyala, escenario de violencias confesionales.
Dos ex miembros del partido Baas, en el poder durante el régimen de Saddam Hussein, murieron en dos ataques diferentes en Mossul, en la noche del domingo al lunes, anunció un general de la policía de la ciudad, situada a 370 km al norte de Bagdad.
El cuerpo de una mujer muerta a balazos fue descubierto por la policía en Hafriya, a 50 km al sur de Bagdad .