TOKIO.- Al menos 147 personas fallecieron en Japón durante el pasado año fiscal, debido al "karoshi" o muerte por exceso de trabajo, informó hoy el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar.
Asimismo, 66 personas se suicidaron o intentaron acabar con su vida por cuestiones relacionadas con la presión laboral o por trabajar horas extras, lo que supone un cifra récord en Japón, según recogió la agencia Kyodo.
En total, 355 trabajadores recibirán compensaciones estatales del Gobierno japonés por haber sufrido problemas o enfermedades derivadas del exceso de trabajo, entre los que destacan los casos de derrames cerebrales y ataques al corazón.
De los afectados, el 25% trabaja en los sectores de transporte y telecomunicaciones, según el informe.
Un portavoz de Ministerio de salud criticó el hecho de que muchos japoneses "estén trabajando bajo una fuerte presión y se les exija resultados sin recibir a cambio el suficiente apoyo por parte de la empresa".
Por otra parte, también durante el pasado año fiscal, 819 trabajadores solicitaron al gobierno compensaciones económicas debido a problemas mentales derivados del exceso de trabajo, lo que supone un incremento del 25% en relación a las estadísticas del anterior año fiscal.
Finalmente, 205 de estas reclamaciones fueron aprobadas, un 61% más que en el ejercicio de 2005.
En 1992, el gobierno japonés reconoció por primera vez que es posible morir debido a la falta de descanso por las obligaciones laborales, dando origen al término "karoshi" que se hizo sinónimo en todo el mundo de la muerte por exceso de trabajo.