BUENOS AIRES.- El gobierno argentino cesó hoy al titular del ente regulador del gas y a un gerente del estatal Banco Nación por su presunta vinculación con un escándalo de corrupción en la adjudicación de la construcción de gasoductos.
Se trata de Fulvio Madaro, presidente del directorio del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), y Néstor Ulloa, gerente de Fideicomisos del Banco Nación, informó el jefe del Gabinete, Alberto Fernández, en una rueda de prensa.
Fernández explicó que la destitución de ambos funcionarios fue dispuesta a través de un decreto firmado por el presidente del país, Néstor Kirchner, pocas horas después de que el juez que investiga el caso citó a prestar declaración indagatoria a Madaro y Ulloa.
El magistrado Guillermo Montenegro también ordenó hoy que sean interrogados cinco ex directivos de la constructora sueca Skanska, sospechada de haber pagado sobornos a funcionarios gubernamentales con el objetivo de que se le adjudicaran obras de ampliación de gasoductos.
Bajo la dirección de Madaro, el Enargas debía supervisar la adjudicación de esas obras, mientras que Ulloa fue el administrador del fideicomiso constituido por distintas empresas privadas para financiar la ampliación de dos gasoductos en este país.
"Hemos manifestado públicamente que en el caso Skanska, si se conociera el nombre de un funcionario que pudiere estar implicado, no duraría ni un minuto en funciones", dice el decreto firmado por Kirchner.
Fernández indicó que, en una conversación telefónica que mantuvo hoy con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, el fiscal del caso, Carlos Stornelli, dijo que había “escuchado una grabación” que comprometía a Madaro y Ulloa en el escándalo de corrupción.