WASHINGTON.- El mapa genético del mosquito que disemina la fiebre amarilla y el dengue es más complejo que el del insecto que transmite el paludismo, y los científicos esperan emplear esa información para encontrar formas de destruir a los pequeños asesinos.
Un grupo de investigadores publicó el genoma, mapa genético de todo el ADN, de la especie de mosquito Aedes aegypti, un conocedor de la sangre humana que transmite la enfermedad del dengue y la fiebre amarilla, en zonas tropicales y subtropicales del mundo.
Según los expertos, el genoma podría guiar los esfuerzos para desarrollar insecticidas o crear versiones genéticamente modificadas de este mosquito, que no puedan o sean menos capaces de transmitir los virus que provocan ambas enfermedades.
Éste es uno de los pocos insectos cuyos genomas ha sido identificado y la segunda especie de mosquito de la que se conoce su formación genética.
El genoma del Anopheles gambiae, que transporta el parásito que causa el paludismo, fue publicado en 2002. Existen alrededor de unas 3.500 especies de mosquito, pero estas dos son las que provocan los mayores problemas en los seres humanos.
En un artículo publicado en la revista "Science", los investigadores indicaron que el genoma del Aedes aegypti es unas cinco veces mayor que el del Anopheles gambiae. Si bien ambos tienen 16.000 genes, el primero está más cargado de "ADN basura" y otro tipo de material cuya función no está clara.
El Aedes aegypti puede transmitir virus que causan enfermedad mientras consume la sangre humana.
La fiebre amarilla, común en África occidental y central y en algunas partes de Sudamérica, provoca la muerte de 30.000 personas anualmente. Existe una vacuna hace décadas, pero el número de personas infectadas aumentó en los últimos 20 años, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por su parte, el dengue está presente en alrededor de 100 países de regiones tropicales del mundo y causa la muerte de 25.000 personas al año. No existe vacuna para tratarlo.