JERUSALÉN.- Milicianos palestinos reanudaron hoy el disparo de cohetes Al Kasam contra el sur de Israel después de la muerte anoche de nueve personas en la franja de Gaza por los ataques de la Fuerza Aérea israelí, que causaron además 20 heridos.
Dos de los cohetes cayeron, sin consecuencias, a primeras horas de la mañana en Sderot, localidad que han abandonado al menos 5.000 de sus 23.000 habitantes tras los reiterados ataques lanzados desde Gaza en la última semana.
Otro proyectil cayó al sur de la ciudad de Ashkelon, sobre el Mediterráneo, y el cuarto en el desierto del Néguev. Tampoco se informó de víctimas o daños por estos dos últimos ataques.
Mientras, el Ejército israelí, y en particular la Fuerza Aérea, tiene carta blanca para intensificar sus ataques contra los milicianos de Gaza a fin de impedirles el lanzamiento de los imprecisos cohetes Al Kasam, que disparan desde plataformas móviles, según una decisión adoptada ayer por el Gabinete de Seguridad.
Fuentes militares reiteraron hoy que el ataque lanzado anoche en el barrio de Seyaíe de Gaza, en el que perdieron la vida nueve personas, no tenía como objetivo el “asesinato selectivo" del diputado palestino Jalil Al Haya, sino que iba dirigido contra cinco milicianos islamistas de Hamas.
Los proyectiles disparados desde el aire impactaron en el edificio donde reside la familia de Al Haya, que no se hallaba en su hogar en ese momento, y mataron a siete de sus parientes, entre estos a su padre y dos menores de edad, dijeron las fuentes.
Entre los muertos había dos milicianos islamistas, entre estos Samaeh Faraune, de 28 años, mientras que el segundo no fue identificado, añadieron las fuentes.
La novena víctima mortal, que tampoco ha sido identificada, perdió la vida en alguno de los otros de siete ataques lanzados anoche por Israel.
En otro ataque israelí, esta vez con fuego de artillería, resultaron levemente heridos tres hijos de otro diputado de Hamas, Amin al Masri, en el campo de refugiados de Yebalia, junto a la localidad norteña de Beit Lagye, según fuentes médicas de esa localidad.
La ministra israelí de Exteriores, Tzipi Livni, se reunirá esta noche en Sderot con el alto representante de Política Exterior y Seguridad Común de la Unión Europea (UE), Javier Solana, quien llegará hoy en medio de un agravamiento de la crisis armada entre Israel y los palestinos.
"La sangre palestina no se derramó en vano,” expresó anoche en Gaza el primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Ismail Haniye, quien, junto al presidente Mahmud Abás, exigió una intervención urgente de la comunidad internacional a fin de presionar a Israel para que detenga sus ataques.
"Todas las opciones están abiertas” para vengar a los muertos palestinos, dijo, por su parte, un portavoz de Hamas, Abu Obeid, mientras otros prometen “sacudir a Israel como un terremoto".
Muchas personalidades de Hamas y la Yihad Islámica, los objetivos determinados por el Gabinete israelí de Seguridad, y no sólo sus milicianos, se hallan ahora supuestamente en la clandestinidad al reanudar Israel sus “asesinatos selectivos", incluso contra sus dirigentes políticos, según el viceministro de Defensa, Efraim Sné.