SEÚL.- El presidente del grupo surcoreano Hanwha y uno de los hombres más ricos del país, Kim Seung-hyum, ha alcanzado un acuerdo extrajudicial con los empleados de un bar a los que agredió en represalia a la paliza que propinaron a su hijo, informó hoy la agencia surcoreana Yonhap.
Una fuente judicial informó de que, a pesar de ese acuerdo, la fiscalía seguirá con el proceso contra Kim, acusado de movilizar a un grupo de hombres para agredir a los empleados de un bar de Seúl tras enterarse de que uno de ellos había pegado a su hijo el pasado 8 de marzo.
A comienzos de mayo un juzgado de Seúl emitió una orden de detención contra el presidente de uno de los principales conglomerados empresariales de Corea del Sur.
Los abogados del magnate no informaron de cuanto pagó Kim a los empleados del bar como compensación, pero es público que el acusado depositó con anterioridad en el juzgado 15 millones de wones (16.000 dólares) para cada víctima para reparar los daños causados.
Considerado uno de los hombres más ricos de Corea del Sur, Kim Seung-hyum fue acusado a finales de abril de estar implicado en un ataque a empleados de un bar de lujo del centro de Seúl.
Los medios locales publicaron que, comandados por Kim, sus guardaespaldas los habrían agredido en represalia por un ataque previo a su hijo Jae-won, de 22 años.
Al parecer, el hijo del empresario sufrió una herida en un ojo y le tuvieron que poner varios puntos de sutura tras un violento enfrentamiento con los responsables del bar.
Corea del Sur, décima economía del mundo, está dominada por grupos empresariales familiares y este caso ha sido seguido como un culebrón por los medios locales.
El grupo Hanwha, creado en 1952, agrupa a empresas productoras de explosivos, farmacéuticas y financieras, además de a un equipo de béisbol.