Una de cada seis especies de mamíferos está en peligro de extinción en Europa

PARÍS.- Una de cada seis especies de mamíferos está en vías de desaparición en Europa, al igual que el 22% de los mamíferos marinos, según la primera evaluación global llevada a cabo por la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza (UICN) a petición de la Comisión Europea.

Asimismo, el estudio advierte que la cuarta parte de las poblaciones de mamíferos se encuentra en declive.

"Europa alberga dos de las especies más amenazadas en el mundo, el lince ibérico y la foca monja del Mediterráneo, las dos figuran en la lista de las especies en peligro crítico", escribe la Unión en un comunicado en el que da la voz de alarma: sólo quedan 150 linces ibéricos, y entre 350 y 450 focas monjas.

A la inversa, el 8% de las especies de mamíferos ha registrado un aumento de población, como es el caso del bisonte, que a principios del siglo XX estaba amenazado de desaparición y ahora cuenta con 1.800 moradores, gracias a una política de introducción y reintroducción.

El destino de los mamíferos marinos es todavía más alarmante. Aparte del riesgo de extinción de aproximadamente la cuarta parte de ellos, se desconoce la situación de casi la mitad (44%) de las especies, señala la UICN, que teme que el peligro de desaparición sea aún mayor.

En cambio, se estima que sólo el 13% de las especies de pájaros está en peligro.

Las principales amenazas que pesan sobre los mamíferos europeos se deben al deterioro de su hábitat natural, a la deforestación o la sequía de las tierras húmedas, la contaminación y, por último, la sobreexplotación de la pesca y la caza, según la UICN.

Las especies marinas padecen sobre todo una polución salvaje, y una mortalidad accidental provocada por la pesca y las colisiones de navíos.

Las especies amenazadas viven en un arco que abarca desde los Pirineos hasta la península balcánica, a lo largo y ancho de todas las cadenas montañosas.

En virtud de una directiva europea de 1992, los Estados miembros del bloque deben crear una red de espacios protegidos conocida como "Natura 2000" para frenar la pérdida de la biodiversidad antes de 2010.