LONDRES.- La Reina Isabel II de Inglaterra está supuestamente “exasperada y frustrada” por ciertas medidas del legado político del primer ministro Tony Blair, que se dispone a dejar el Gobierno el 27 de junio, tras diez años en el poder.
Eso es al menos lo que afirma hoy en su primera página el dominical conservador “The Sunday Telegraph,” que cita como fuente a "amigos” de la familia real.
Isabel II, de legendaria discreción, está al parecer descontenta con medidas como la prohibición de la tradicional caza del zorro, que han dividido a los británicos, o el cierre de muchas estafetas de correos rurales, que afectan a la gente que vive en el campo.
Según el periódico, Isabel II opina igualmente que “Blair ha pasado demasiado tiempo tratando de caerle bien al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en detrimento de su querida Commonwealth”.
Isabel II, de 81 años, que ha reinado durante 51, es cabeza de esa comunidad de naciones."La Reina se siente exasperada y frustrada por la manía de cambiar por cambiar,” dijo al periódico una fuente próxima a la Soberana.
El periódico señala que las visitas anuales de Tony Blair y su esposa, Cherie, a Isabel II y al príncipe Felipe de Edimburgo en su castillo escocés de Balmoral no han discurrido sin ciertas tensiones porque los dos matrimonios tienen poco en común.
Según “The Sunday Times,” a la abogada Cherie Blair, que no es precisamente una monárquica entusiasta, le disgustan el castillo y los tipos que rodean a la soberana y que tienen aficiones como la pesca o la caza.
En una de las primeras reuniones que mantuvieron Tony Blair e Isabel II, aquél pidió a la soberana que le llamara simplemente "Tony,” peor la Reina se negó y prefirió seguirle llamado “primer ministro”.
Pese a todo, el periódico señala que no hay “animadversión" personal entre la Reina y Blair, con quien tiene “una buena relación de trabajo” y del quien admira “su infatigable labor a favor del proceso de paz en Irlanda del Norte”.
En cuanto a la decisión de Blair de invadir Irak del brazo de Estados Unidos, la más controvertida de sus diez años en el poder, el periódico dice que la Reina, que es jefe de las Fuerzas Armadas, no ha dicho siquiera a sus amigos más íntimos cuál es su opinión al respecto.
La mayoría de las personas a las que entrevistó el periódico no quisieron ser identificadas.
Una de ellas, sin embargo, el agricultor John Daw, dijo al dominical que en cierta ocasión, tras la crisis de la fiebre aftosa, le comentó a la Reina que, en su opinión, Tony Blair y su Gobierno no entendían “el campo inglés.”
"Ya lo sé. Se lo digo todas las semanas cuando le veo,” comentó supuestamente la Reina con “rara indiscreción,” dice el periódico.
Aunque la Reina de Inglaterra, como jefe de Estado, está por encima de la política de los partidos, es sabido que se ha sentido más próxima a algunos primeros ministros que a otros.
Así, en julio de 1986, personas cercanas a Isabel II revelaron a la prensa que consideraba que la política de la primera ministra conservadora, Margaret Thatcher, creaba divisiones y enfrentamientos entre los británicos.