Servicio secreto británico pudo haber matado a ex espía ruso

MOSCÚ.- El ex agente secreto ruso Andrei Lugovoi, acusado por la Justicia británica del asesinato mediante envenenamiento del también ex agente del KGB Alexander Litvinenko, afirmó hoy que éste posiblemente fuera asesinado por el propio servicio secreto británico.

Lugovoi, actualmente un hombre de negocios, dijo en conferencia de prensa en Moscú que, en su opinión, ésta es una de las posibles versiones que explican la muerte de Litvinenko el pasado mes de noviembre en Londres.

También afirmó que no se puede descartar que el oligarca ruso Boris Berezovski, quien vive exiliado en Londres, sea responsable de la muerte de Litvinenko, quien falleció tras una larga agonía después de haber sido envenenado con el isótopo radiactivo polonio 210.

Lugovoi sostuvo que el servicio secreto externo de Gran Bretaña, el MI-6, intentó reclutarlo para que consiguiera material que implicara en el crimen al presidente ruso Vladimir Putin. Además, aseguró que tanto Litvinenko como Berezovski, un duro crítico del presidente ruso, trabajaron para el servicio secreto británico.

A la conferencia de prensa asistió también Dmitri Kovtun, quien junto con Lugovoi se había reunido con Litvinenko en un hotel londinense el día en que éste fue envenenado.

La rueda de prensa fue transmitida en vivo y directo por la emisora televisiva "Russia Today", que emite sus programas en inglés y está controlada por el Kremlin.

Rastros del isótopo radiactivo polonio 210 fueron encontrados en los cuerpos tanto de Lugovoi como de Kovtun. Al respecto, Lugovoi dijo en la conferencia de prensa que, sin saberlo, alguien hizo que el veneno entrara en contacto con su cuerpo.

En una declaración publicada de forma póstuma, Litvinenko responsabilizó de su muerte al presidente Putin. El Kremlin ha puesto en duda la autenticidad de este documento.

La fiscalía británica acusó el 22 de mayo a Lugovoi del asesinato de Litvinenko. El primer ministro británico, Tony Blair, exigió a Rusia que respete las "reglas de la ley" y extradite a Lugovoi, petición que fue rechazada inmediatamente por las autoridades rusas.