MANILA.- Una institución oficial filipina, la Comisión sobre Derechos Humanos (CHR), “suspendió” hoy a la presidenta del país, Gloria Macapagal Arroyo, quien a su juicio ha fracasado en sus políticas para poner fin a las violaciones y abusos de garantías cívicas.
La presidenta de la CHR, Purificación Quisumbing, otorgó al Gobierno liderado por Arroyo una calificación de sólo 4 sobre 10, según la televisión local ABS-CBN.
En este sentido, destacó la ola de violencia política y los denominados “asesinatos extrajudiciales,” por los que es preguntada la presidenta en sus visitas oficiales a otros países y que siguen sin resolver pese a las numerosas denuncias remitidas por la CHR al Departamento de Justicia filipino.
Quisumbing espera que este Ministerio siga el ejemplo del Tribunal Supremo, que recientemente desestimó los cargos de rebelión presentados por el Ejecutivo contra seis legisladores de la oposición de izquierdas por haber presuntamente conspirado para derrocar a la presidenta.
La organización de derechos humanos Karapatan (Derecho) ha documentado más de 850 asesinatos y cerca de 400 intentos frustrados relacionados con activistas de izquierda y opositores en Filipinas desde enero de 2001, cuando llegó al poder Arroyo, pero la Policía reconoce apenas unas 120 muertes por razones políticas.
Otros grupos mantienen que estas “ejecuciones extrajudiciales" forman parte de una estrategia premeditada dentro de la lucha contra la insurgencia comunista del Nuevo Ejército del Pueblo y que identifica como miembros de la guerrilla a cualquier militante, sindicalista o periodista opositor al Gobierno o defensor de la reforma agraria, entre otros.