EMOLTV

Sarkozy logra mayoría absoluta en parlamento francés, pero socialistas resisten

El partido del recientemente electo presidente francés se quedó con 314 escaños, lo que significa un retroceso con respecto a sus escaños previos. La abstención de los votantes llegó a un 40%.

17 de Junio de 2007 | 19:20 | AFP
imagen

Con un 40 de abstención se realizó la elección parlamentaria en Francia.

AFP

PARÍS.- La derecha del presidente francés Nicolas Sarkozy consiguió la mayoría absoluta en la segunda vuelta de las elecciones legislativas del domingo, lo cual significa que el jefe de Estado podrá ejercer cómodamente el poder, pero deberá contar con una inesperada y fuerte oposición socialista.

El partido Unión por un Movimiento Popular (UMP) contará con 314 diputados en la nueva Asamblea Nacional, frente a los 359 que tuvo en la Cámara saliente y sobre un total de 577, según las cifras definitivas proporcionadas por el Ministerio del Interior. Por su lado, el Partido Socialista tendrá 185, frente a los 149 actuales.

El resultado es un éxito para la UMP, pero la formación no consiguió finalmente la abrumadora mayoría absoluta que preveían los sondeos, ya que los franceses decidieron no otorgar todos los poderes al partido de Sarkozy.

"Ha sido una elección clara y coherente que permitirá al presidente de la República llevar a la práctica su proyecto" de reformas, se congratuló el primer ministro, François Fillon, comprometiéndose a respetar y a establecer un "diálogo franco" con la oposición de izquierda.

Para la derecha, el golpe más duro de esta noche fue la derrota del número dos del gobierno y titular de Ecología, Alain Juppé, en Burdeos (suroeste), quien presentó su dimisión.

La configuración de la nueva Cámara de Diputados consolidará el bipartidismo en Francia y reducirá el peso de formaciones minoritarias.

Así, los comunistas tendrían 15 escaños, los Verdes, cuatro, el centrista Movimiento Demócrata de François Bayrou, tres, y el Frente Nacional (extrema derecha), ninguno.

Con suerte y gracias a alianzas, estos partidos podrán llegar a reunir 20 escaños, cifra mínima para formar un grupo parlamentario, lo cual concede derecho a voz y voto en la Asamblea.

El "Nuevo Centro", ex compañeros de Bayrou aliados a Sarkozy, llegarán sin problema a 22 diputados. Completan la Asamblea una serie de diputados que se adscriben así: 15  diversos de izquierda, nueve diversos de derecha, siete radicales de izquierda, uno de extrema derecha, un regionalista y un diverso.

Los socialistas, desgarrados por la derrota de su candidata, Ségolène Royal, en las presidenciales, consiguieron finalmente movilizar a su electorado y convencerlo de la necesidad de construir una oposición fuerte.

"Con estas elecciones, nuestros conciudadanos han querido instalar una fuerza frente al poder actual, para permitir el equilibrio y el contrapeso indispensables en una democracia", se felicitó el primer secretario socialista, François Hollande.

Pero en esta noche electoral, la gran e inesperada noticia fue el anuncio de que Royal y Hollande se han separado después de 30 años de unión y cuatro hijos en común.

La candidata socialista lo anunció así en un libro escrito por dos periodistas de la AFP que saldrá a la venta el miércoles y en el que confirmó que su ex compañero tenía una historia sentimental con otra persona.

En el ámbito puramente político y como ocurrió en la primera vuelta, la abstención en la segunda vuelta fue de cerca del 40%, un signo de la escasa motivación de los franceses, que votaron el domingo por cuarta vez en menos de dos meses.

Con estos comicios, se cierra un ciclo electoral en Francia que comenzó en abril, con unos comicios presidenciales que abrieron una nueva era política tras 12 años en el poder de Jacques Chirac.

Sarkozy, de 52 años, un presidente hiperactivo y muy popular, prometió romper con la forma de gobernar de sus predecesores y construyó un gobierno en el que incluyó a personalidades de centro e izquierda.

El jefe de Estado pidió con insistencia a los franceses que le dieran una mayoría amplia en la Cámara de Diputados para poder hacer realidad un ambicioso programa de reformas, que incluye desde costosas medidas fiscales hasta normas que controlan más la inmigración.

La nueva Cámara de Diputados se reunirá en sesión extraordinaria a finales  de junio para comenzar a aprobar normas que pongan en práctica la ruptura  anunciada por Sarkozy.

En las filas socialistas esta derrota honrosa no evitará la batalla interna  por el liderazgo de la formación, una guerra no declarada que ya ha comenzado.

Royal, muy popular entre los afiliados, pero criticada por algunos dirigentes, no oculta su deseo de sustituir a Hollande en 2008 tras un congreso del partido, pero imponerse a los pesos pesados del partido será una tarea ardua.

Más allá de renovar su dirección, el PS se verá obligado tras estos comicios a iniciar una imprescindible refundación, como hicieron sus compañeros de toda Europa, con el fin de dejar de ser el eterno perdedor en las urnas y reducir el abismo entre el partido y sus electores.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?