Londres. - El futuro primer ministro británico Gordon Brown defendió hoy en una entrevista con la BBC la política en Irak de su gobierno.
Aunque admitió que se habían cometido errores, aseguró sin embargo que fue correcto derrocar el régimen de Saddam Hussein.
Los iraquíes, dijo, tienen parámetros democráticos y pueden votar con libertad.Brown añadió que procurará en el futuro una mayor separación entre las informaciones del servicio secreto y las decisiones políticas del gobierno.
La invasión de Irak se argumentó con informaciones de los servicios secretos estadounidenses y británicos, que sostenían que Bagdad disponía de armas de destrucción masiva.
Brown, de 56 años, será declarado formalmente mañana el nuevo presidente del Partido Laborista y asumirá el cargo del primer ministro el próximo miércoles.
Durante la entrevista con el canal británico, Brown no hizo ninguna referencia a una eventual retirada adelantada de los 7.200 soldados británicos destacados en Irak, un tema sobre el que se especula en los medios británicos a raíz del cambio de inquilino en Downing Street.
El futuro "premier" conversó recientemente en Bagdad sobre la situación en Irak con dirigentes locales.
Además, se reunió con generales británicos.En los últimos días, informaciones aparecidas en medios londinenses señalan que varios altos cargos militares están a favor de un repliegue británico antes de 2008.
Y un plan concreto para ello será a presentado a Brown tras suceder a Tony Blair el 27 de junio.El hasta ahora canciller del Tesoro fue el único candidato para la presidencia del Laborismo, por lo que fue designado sucesor de Blair al frente del partido sin una elección previa.
El domingo se realizará formalmente el cambio en la cúpula del partido en el congreso del partido Laborista en Manchester.