BARCELONA.- Los pueblos que desde hace milenios habitan el Ártico, como los esquimales, podrían perder su cultura en las próximas décadas a consecuencia del cambio climático, aseguró la investigadora noruega Grete K. Hovelsrud.
El deshielo previsto de gran parte del Polo Norte cambiará el hábitat y la forma de vida de estos pobladores, dijo Hovelsrud, pese a que han demostrado su gran capacidad de adaptación a condiciones medioambientales y sociales cambiantes.
En la inmensa región ártica, extendida a lo largo de Alaska, Groenlandia, Siberia, Canadá y Escandinavia, viven actualmente unos cuatro millones de personas, pertenecientes a grupos indígenas como los "saami", que habitan en Noruega, Suecia y Finlandia, y los "inuits", también conocidos como esquimales, presentes sobre todo en Alaska y Canadá.
Seis mil años en el Ártico
Se calcula que los esquimales, quizá el pueblo indígena más ancestral, se instalaron hace más de 6.000 años en el Ártico, donde subsisten gracias a la pesca y la caza de focas, ballenas y osos, animales que viven en un hielo que se reduce a una velocidad del 15 por ciento cada año.
"Estos animales siguen al hielo y, si éste se va, se van también ellos", señaló Hovelsrud, quien indicó que el calentamiento de los polos está provocando también que las capas heladas sean cada vez más delgadas y frágiles, lo que convierte en una actividad altamente arriesgada pescar o desplazarse sobre ellas.
El deshielo y el aumento de la temperatura en el casquete polar ártico también está dejando ver ya algunos cambios en el ecosistema animal.
Así, en Noruega el bacalao se desplaza más al norte en busca de aguas más gélidas, mientras en Groenlandia se han descubierto nuevas especies de peces hasta ahora desconocidas en la zona.
Pero este deshielo tiene otros efectos negativos, como la subida del nivel del mar, llegando a inundar pueblos costeros, una mayor erosión de estas zonas y la desintegración de grandes placas de hielo, que permitirán el paso de buques y barcos de gran tamaño, con la contaminación que ello conllevará.
La experta considera que "es posible" que pueblos que viven del mar y de la caza de animales, como los "inuit", "pierdan su cultura" ante la necesidad de adaptarse a un entorno que nada tendrá que ver con el que heredaron de sus antepasados.
"Los esquimales seguirán existiendo, pero perderán sus tradiciones y sus costumbres. Tendrán que adaptarse, buscar otros medios de vida, y ello comportará la desaparición de su cultura. Las personas de más edad, sobre todo, no sabrán cómo responder a esta compleja situación", subrayó Hovelsrud.
La experta, que dirige el Centro para la Investigación del Clima y el Entorno de Oslo (Noruega), aseguró que los indígenas polares se sienten "impotentes" ante esta situación, más aún teniendo en cuenta que el Ártico sólo aporta el 2 por ciento de las emisiones globales de CO2, principal causa del calentamiento del planeta.
Grete K. Hovelsrud ha visitado Barcelona para participar en el ciclo de conferencias sobre el cambio climático que organiza la Fundación Caixa Catalunya con motivo del Año Polar Internacional.