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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 13:57
La Cámara Alta chilena aprobó el 6 de junio pasado una resolución en la que solicita a la Presidenta Michelle Bachelet que rechace toda forma de encarcelamiento por motivos políticos o ideológicos en Cuba.
El MercurioLA HABANA.- Cuba acusó al Senado chileno de entrometerse en sus asuntos domésticos al pedir la libertad de los presos políticos en la isla, y le aconsejó que mejor se ocupe de resolver los problemas heredados de la dictadura de Augusto Pinochet.
La Cámara Alta chilena aprobó el 6 de junio pasado una resolución en la que solicita a la Presidenta Michelle Bachelet que rechace toda forma de encarcelamiento por motivos políticos o ideológicos en Cuba, y pide al gobierno de la isla que ponga fin a este tipo de detenciones, especialmente las que se produjeron en 2003, contra aquellos que fueran contrarios al régimen de Fidel Castro.
En el documento, los senadores piden al gobierno chileno que exija a La Habana el apego estricto a las recomendaciones de las Naciones Unidas sobre esta materia, y le exhorta a votar a favor de todo informe o declaración del organismo y sus órganos dependientes que dé cuenta de la crítica situación de los derechos humanos en Cuba.
Fue un "injerencista pronunciamiento", dijo la Comisión de Relaciones Internacionales del Parlamento de Cuba, en un texto publicado hoy por el diario oficial Granma.
"Los senadores chilenos no sólo incurren en una intromisión caracterizada por una ignorancia supina, sino que, además, resultaría aconsejable que emplearan mejor su tiempo en la atención a los graves problemas que les demanda su propia sociedad", dice la declaración.
En este sentido, la comisión, reunida esta semana para los trabajos previos al noveno período ordinario de sesiones que tendrá lugar el viernes, hace referencia a "la grave decisión legislativa" de disminuir la edad de responsabilidad penal de 18 a 14 años en Chile.
También se refiere al "reclamo social de abolir la Constitución pinochetista" y aprobar una nueva ley suprema no excluyente, donde el sistema binominal sea "definitivamente proscrito", así como el respeto y reconocimiento de los pueblos originarios chilenos.
Asimismo, cita la "petición reiterada de anular la Ley Antiterrorista 18.314 y por la cual los miembros de la comunidad indígena mapuche han sido acusados de terrorismo.
El Parlamento lamentó que en su declaración sobre Cuba, los senadores chilenos olvidaran mencionar el embargo comercial que Estados Unidos aplica desde hace 45 años contra la isla, que, dijo, "constituye un crimen internacional de genocidio".
Según grupos de derechos humanos, hay alrededor de 280 presos políticos en Cuba. El gobierno cubano los considera mercenarios a sueldo de su enemigo Estados Unidos.
En abril pasado, la Cámara Alta chilena también recibió críticas, luego de que acordara pedir a la Presidenta Michelle Bachelet que protestara ante la OEA por el término de la concesión de operaciones a la estación venezolana Radio Caracas Televisión (RCTV).
El pronunciamiento, que fue aprobado por 18 votos a favor y seis en contra, señalaba que la decisión del régimen de Hugo Chávez de caducar la concesión a RCTV, constituía un atentado a la libertad de pensamiento y de expresión que no podía ser aceptado por los estados democráticos.
La respuesta del Presidente venezolano no se hizo esperar. Chávez afirmó entonces que el Senado chileno estaba dominado por "la extrema derecha fascista", que apoyó golpes de Estado, desapariciones, asesinatos y genocidios, y agregó que el "odio" que le tenía la derecha chilena no le importaba ni le causaba preocupación.
