KENNEBUNKPORT.- La Casa Blanca reforzó este sábado la seguridad en los aeropuertos estadounidenses, luego de que dos coches bomba fueron descubiertos en Londres y un vehículo en llamas chocara contra una terminal aérea en Escocia, informó un portavoz presidencial.
El portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, precisó, sin embargo, que el nivel de alerta antiterrorista permanece igual en el país y que no existe "ninguna indicación de una amenaza precisa o creíble contra Estados Unidos".
"En los aeropuertos hay algunas medidas para incrementar el alerta que la TSA (Administración de Seguridad de Transporte) ha pedido", dijo.
"Esto lo podrán ver en una mayor presencia de agentes de la TSA afuera de las terminales, habrán inconvenientes para los pasajeros en términos de mayores esperas", agregó.
Snow explicó que se trata sobre todo de crear una "presencia visible que sea disuasiva". El portavoz dijo que no podía precisar si la TSA decidió reforzar la presencia de agentes de seguridad antes o después de tener conocimiento de los eventos en Glasgow.
Por su parte el secretario de Seguridad Interna, Michael Chertoff, dijo que las más altas autoridades de seguridad se reunieron el viernes y sábado para discutir temas relativos a los recientes acontecimientos en Gran Bretaña.
"Hasta este momento no he visto información específica y creíble que sugiera que el último incidente está conectado con una amenaza interna", dijo Chertoff en una declaración.
Al igual que Snow, Chertoff dijo que no tenían planes para cambiar el nivel de alerta, pero recordó que ese nivel "en la aviación ha sido elevado a naranja desde el último otoño", lo que significa que es alto.
Chertoff dijo sin embargo que Seguridad Interna reforzaría las medidas de seguridad en los aeropuertos especialmente en vista del feriado del 4 de julio, fecha en que los estadounidenses celebran su independencia.
Snow informó que el presidente George W. Bush seguirá siendo informado el sábado de la investigación sobre los dos coches bomba descubiertos el viernes en Londres.
"El presidente está totalmente informado, y tiene también conocimiento de lo ocurrido en Glasgow", dijo Snow.
El portavoz señaló que la permanencia de Bush en la residencia vacacional de su familia en Kennebunkport, Maine (noreste), por algunos días no será interrumpida ni le impedirá seguir de cerca la evolución de los hechos en Gran Bretaña.
"Es importante saber que permanecemos comprometidos a estar vigilantes en todo el país, incluyendo los aeropuertos", agregó Snow a la vez que recordaba que en "una guerra global contra el terrorismo" todo el mundo debe estar atento.