LONDRES.- El aventurero británico Lewis Gordon Pugh se propone superar su propio récord nadando en las aguas heladas del Polo Norte para llamar la atención del mundo sobre los "efectos devastadores" del cambio climático sobre ese hábitat.
Pugh, de 37 años, salió el domingo por vía aérea de Londres con dirección a Helsinki, desde donde se trasladará a Murmansk para desde allí viajar en un rompehielos ruso hasta su destino en las proximidades del Polo Norte geográfico.
Allí intentará hacer un kilómetro a nado en aguas a temperaturas de menos 1.8 grados centígrados y, de triunfar en su intento, superará el récord que estableció él mismo en el 2005 al nadar en la Antártida en aguas a cero grados centígrados.
De acuerdo con las reglas de la Asociación de Natación del Canal de la Mancha, a pesar de temperaturas tan extremas, sólo llevará un bañador, gorra y gafas.
Pugh confía en que completar su hazaña en esas aguas heladas, que tendrá lugar el 15 de julio, le lleve veintiún minutos.
Antes de comenzar su viaje, el aventurero británico señaló a la prensa que hace diez o sólo cinco años, esa aventura no habría sido posible ya que la superficie habría estado entonces totalmente helada.
"El Ártico es un área de increíble belleza, pero es al mismo tiempo muy frágil", señaló Pugh, según el cual en esa región se ha producido el mayor aumento de la temperatura de la atmósfera, lo que ha contribuido a la fusión de los hielos.
Pugh va acompañado en su viaje de Jorgen Amundsen, pariente de Roald Mundsen, el primer hombre que alcanzó a pie en Polo Sur.
En el 2006, el británico, embajador del Foro Mundial para la Naturaleza, nadó todo el recorrido del Támesis, desde el nacimiento hasta su desembocadura, para llamar la atención sobre el calentamiento del planeta.