MOSCÚ.- El bisemanario "Nóvaya Gazeta" publica hoy por primera vez las fotos de 21 terroristas que participaron en septiembre de 2004 en la matanza de la escuela de Beslán en Osetia del Norte.
Los terroristas, cuyas fotografías van acompañadas de sus respectivos nombres y apellidos, tenían edades comprendidas entre los 20 y 34 años.
Según el diario, 11 de ellos habían sido detenidos con anterioridad o eran buscados por el Servicio Federal de Seguridad (FSB, antigua KGB), que tendría en su poder sus huellas dactilares y fotografías antes de que éstos cometieran la matanza.
Algunos de ellos tomaron parte en junio de 2004 en el asalto contra los edificios de las fuerzas de seguridad de la república de Ingushetia, en el que murieron un centenar de personas.
La Fiscalía rusa, que ha identificado únicamente a 23 de los 31 terroristas abatidos durante la operación de rescate de la escuela, siempre ha negado a los familiares de las víctimas de la matanza el acceso a esas fotografías.
Según el informe de una comisión parlamentaria, el número de terroristas que participaron en el secuestro masivo de la escuela era de 32, de los cuales el único sobreviviente fue Nurpashá Kuláyev, condenado a cadena perpetua.
En cambio, el diputado Yuri Savéliev, miembro de esa comisión, presentó el año pasado un informe alternativo que contradecía la versión oficial al cifrar en casi 70 los terroristas participantes.
La organización "La Voz de Beslán", que agrupa a 89 madres de escolares muertos en la escuela noroseta, presentó el 26 de junio pasado un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.
Las madres tomaron esa decisión después de que la Justicia de Osetia del Norte rechazara su recurso para abrir un proceso judicial contra las fuerzas de seguridad rusas, en relación con la matanza ocurrida tras el asalto de la escuela número uno.
Los familiares de las víctimas, algunas de las cuales acusan a las autoridades de "crimen de Estado", consideran que los cuerpos de seguridad son los responsables de la matanza por apostar desde el principio por la fuerza como única solución.
Una comisión parlamentaria exculpó en diciembre pasado de toda responsabilidad a las autoridades rusas en la matanza, aduciendo que las fuerzas de seguridad no disponían de información sobre un posible atentado terrorista en Beslán.
El Parlamento ruso responsabilizó directamente de la matanza al comandante de la guerrilla separatista chechena, Shamil Basáyev, que reivindicó el secuestro, y también al que fuera Presidente de la Chechenia independiente, Aslán Masjádov, ambos abatidos posteriormente por las fuerzas rusas.
En la matanza de Beslán murieron 318 rehenes, de ellos 186 niños, 3 socorristas y 10 agentes de seguridad, mientras otros tres rehenes fallecieron a consecuencia de las heridas ya en el hospital.