LIMA.- El ex Presidente peruano Alberto Fujimori podría recurrir a una tercera nacionalidad, la norcoreana, para intentar eludir a la Justicia de su país natal, según afirma hoy el diario limeño "El Comercio".
La versión, atribuida por "El Comercio" a "fuentes cercanas al ex Mandatario" a las que no identifica, dice que Fujimori tiene derecho por matrimonio a un pasaporte de Corea del Norte, ya que su esposa, la japonesa Satomi Kataoka, tiene nacionalidad norcoreana tras haber vivido una parte de su vida en ese país.
De esa forma, añade el diario, el ex Presidente busca utilizar esa opción como un "plan de contingencia", aunque no está claro en que forma podría encausar ese propósito.
Según la prensa peruana, la situación actual de Fujimori es muy complicada, pues no sólo hay numerosos indicios de que la Justicia chilena se pronunciará en favor de la extradición, sino que además sus posibilidades de ser elegido senador de Japón parecen remotas.
El corresponsal de "El Comercio" en Tokio, Mario Castro, destaca hoy que la candidatura de Fujimori pasa inadvertida en el Japón a falta de 19 días para los comicios y que su mensaje de ayer a ese país no tuvo el más mínimo impacto. En una encuesta realizada por el diario "Nikkei" entre 1.526 personas, ninguna expresó simpatía por su postulación.
Por el contrario, según destacan analistas peruanos, el mensaje dado desde Chile por Fujimori a sus potenciales electores, en el que prometió dar "mi mejor esfuerzo y mi vida por el país de mi padre y mi madre, Japón, y por la tierra de los samurais", sólo sirvió para distanciarlo más de sus seguidores en el Perú.
"Fujimori no sólo traiciona a sus seguidores, sino también a todo el Perú y a la democracia peruana", dijo el ex procurador anticorrupción adjunto Ronald Gamarra respecto al anunciado sometimiento del ex residente a un país distinto.¨
Pero, aún en el caso de que Fujimori lograra ser elegido senador por la pequeña agrupación ultraderechista Nuevo Partido del Pueblo, portavoces chilenos y peruanos insisten en que ese hecho no cambiaría en nada el proceso de extradición desarrollado por la Justicia peruana, que lo busca por delitos de lesa humanidad y corrupción.
Mientras tanto, las huestes fujimoristas en el Perú se debaten en duros enfrentamientos internos, en los que influyentes líderes del sector como la ex candidata presidencial Martha Chávez y el congresista Carlos Raffo se lanzan a diario insultos entre sí, y se acusan de pretender apropiarse del legado de su líder.