ISLAMABAD.- Dos bombas explotaron hoy en Pakistán, una en el sur y otra en el noroeste, provocando la muerte de 32 personas y continuando con una serie de ataques que ya provocó alrededor de 150 muertes tras el asalto de las fuerzas de seguridad a una mezquita radical.
Si bien la mayoría de los ataques se produjo hasta ahora en el noroeste pakistaní, una bomba estallo al paso de un convoy con ingenieros chinos y mató al menos a 25 personas en un mercado de la ciudad sureña de Hub, cerca de Karachi. Siete de las víctimas mortales eran policías.
Abdullah Jan Afridi, máxima autoridad policial en Hub Chowki, dijo que los policías escoltaban a un equipo de ingenieros chinos que viajaban a Karachi cuando ocurrió la explosión, sin provocar víctimas entre los ciudadanos chinos.
Se trata del primer ataque de este tipo en el sur pakistaní en la reciente ola de violencia. Aún no estaba claro si estaba relacionado con las represalias de grupos islamistas tras el asalto a la Mezquita Roja o con un movimiento separatista de Baluchistán.
En el noroeste -región de la que provenían muchos de los 102 muertos en el asalto a la Mezquita Roja-, un conductor suicida con bomba se inmoló en un centro de entrenamiento policial en la ciudad de Hangu, provocando la muerte de al menos 7 personas.
Hangu, que tiene una larga historia de violencia sectaria, está cerca de las regiones dominadas por jefes tribales, sobre la frontera con Afganistán y conocida por servir de semillero para milicianos talibanes y de Al Qaeda.