LONDRES.- La conducta sexual de las hembras de ratón puede alterarse de forma espectacular asumiendo roles masculinos, si se desconecta un órgano sensorial en su organismo, según una investigación publicada esta semana en la revista científica británica Nature.
Mediante la interrupción de la función del órgano vomeronasal (OVN), que media en la percepción de las feromonas, se puede conseguir que las hembras de ratón tengan conductas sexuales notablemente masculinas, como montar y empujar con la pelvis.
El OVN, que se encuentra en las cavidades nasales de muchos animales -incluido el ser humano-, posee receptores que responden a las feromonas secretadas y se conecta con una parte del cerebro distinta a la que se conecta el sistema olfativo.
Los científicos británicos y estadounidenses que llevaron a cabo la investigación observaron la conducta de las hembras de ratón que habían sufrido una lesión genética o física de ese órgano sensorial y se dieron cuenta de que éstas manifestaban comportamientos sexuales que eran exclusivamente masculinos.
Además, experimentaban una reducción de conductas típicamente femeninas, como la anidación o la agresión maternal, como se denomina al instinto de las madres de defender a sus crías.
Estos resultados sugieren que, en ratones al menos, el circuito neural que subyace en la conducta masculina está presente en las hembras adultas.
Esto implica un nuevo modelo de diferencias sexuales en el comportamiento según el cual los circuitos masculinos y femeninos coexisten en los cerebros de ambos sexos y son conectados o desconectados por aportaciones sensoriales, tales como las feromonas detectadas por el OVN.