LIMA.- A 48 horas del terremoto que azotó el Perú, nació el viernes en la noche en la ciudad de Pisco un robusto bebé en un hospital de campaña, a pocos metros de las desoladas calles y casas destruidas, con gente durmiendo a la intemperie.
Jesús, un robusto varoncito de 3,5 kilos nació en el hospital de campaña instalado por seguro social en la Plaza de Armas de Pisco, una de las ciudades más afectada por el terremoto de 7,7 grados del miércoles que ha dejado más de 500 muertos y 33.000 damnificados.
Jesús Boquillaza, el orgulloso padre, mostraba una sonrisa por el nacimiento de su primer hijo y porque su esposa Ericka Gutiérrez se encontraba sana, pero también estaba triste debido a que el fuerte sismo le destruyó su vivienda y ahora no sabe a donde llevará a la familia.
"Ahora todo empieza de nuevo para mí. Mi hijo me dará las fuerzas para seguir adelante. Estoy muy contento porque ahora tengo una nueva vida y alguien por quien luchar", dijo a la prensa.
La televisión peruana mostró imágenes en el instante en que nació el pequeño Jesús y su primer llanto que emocionó a los doctores y enfermeras.
El presidente Alan García al conocer el acontecimiento se acercó al hospital para saludar y felicitar al orgulloso padre.
La madre, aún adolorida por el parto, se mostró feliz por el nacimiento del primogénito.
El médico que la atendió, Carlos Orellana, dijo que la experiencia de ver nacer a un niño después de observar tanta muerte y desolación, fue simplemente "maravillosa".
"La vida ha derrotado a la muerte una vez más. Este nacimiento así lo demuestra y también nos da fuerza para seguir trabajando y poder recuperar no sólo Pisco sino también Chincha, Ica y todas las ciudades afectadas", dijo el director ejecutivo de Seguro Social, Fernando Barrios.