PARÍS.- Los socialistas franceses creen que el balance de los cien primeros días de la Presidencia de Nicolas Sarkozy es negativo y critican en especial su "falta de transparencia", en palabras de su líder, François Hollande.
Durante un acto de la organización juvenil socialista Hollande pintó un panorama sombrío de la gestión del Gobierno conservador y denunció el personalismo del presidente de la República y la escasez de información a la opinión pública.
Sarkozy ganó las elecciones presidenciales del 6 de mayo, accedió a la Jefatura del Estado diez días más tarde y su partido, la UMP, ganó las elecciones legislativas de junio, lo que le otorga una cómoda mayoría para gobernar.
Este período de tres meses desde la victoria en las presidenciales se caracteriza por la opacidad, según Hollande, quien aseguró que el Ejecutivo no explica la verdadera situación de la deuda pública francesa, ni la política económica ni las "contrapartidas” por la liberación de las enfermeras búlgaras encarceladas en Libia.
La falta de explicaciones es un factor de preocupación que, según el líder socialista, esconde planes para incrementar el IVA y otras contribuciones para financiar el déficit de la seguridad social.
Todo ello en un contexto de crecimiento económico que Hollande cree que será inferior al dos por ciento, inferior a la previsión del Ministerio de Economía.
Estos primeros meses de Sarkozy al frente del Estado ha permitido comprobar, según el líder del PS, que "para él presidir es hablar, y él es quien habla y decide, porque no hay Gobierno".