HOUSTON.- Astronautas completaron hoy una caminata especial reducida fuera de la Estación Espacial Internacional, luego de observar al poderoso huracán Dean, que podría forzar al transbordador Endeavour a aterrizar un día antes de lo previsto.
Las imágenes de televisión desde el espacio mostraron el remolino masivo de nubes, con el ojo claramente visible mientras la tormenta pasaba por el Mar Caribe con vientos de 240 kilómetros por hora (kph).
"Santo cielo", dijo Clay Anderson, cuando se tomó una pausa en su trabajo para mirar desde 320 kilómetros arriba de la Tierra. "Hombre, eso es impresionante", dijo Dave Williams. "Mucho. Sólo son impresionantes cuando no están viniendo hacia tí", agregó Anderson.
Ambos aceleraron un programa de trabajo reducido e intentaron dejar lista a la estación para las próximas actualizaciones, mientras la NASA se preparaba para el posible aterrizaje del Endeavour el martes, un día antes de lo planeado.
La agencia espacial estadounidense temía que Dean forzara la evacuación del Centro Espacial Johnson, en Houston, sede del Control de la Misión, si entra en el Golfo de México la semana próxima, tal como indican los pronósticos.
El transbordador debe aterrizar en el Centro Espacial Kennedy en Florida, que supuestamente no se vería afectado por Dean. Si fuera necesario, las funciones del Control de Misión de la NASA podrían trasladarse al Kennedy.
Los ingenieros debían decidir el sábado a la tarde en una reunión del equipo si reducirían la misión del Endeavour. Pero las preparaciones para el regreso del transbordador ya comenzaron.
Los coordinadores de la misión redujeron el número de tareas de la caminata especial el sábado para que Williams y Anderson terminaran en cinco horas, una menos que el plan original.
La veloz caminata permitió a los tripulantes del Endeavour acelerar las preparaciones para dejar la estación. Tenían programado despedirse de la tripulación de la estación y cerrar las compuertas entre las dos naves espaciales más tarde el sábado.
En el Centro Espacial Johnson también comenzaron preparativos para la tormenta, donde el equipo de entrenamiento del transbordador estaba cubierto con lonas amarillas.
Endeavour despegó de Florida el 8 de agosto y llegó a la estación el 10, transportando una vara de metal que los astronautas instalaron en el complejo espacial en la primera de las cuatro caminatas.
La NASA pasó gran parte de la misión evaluando si un corte en la capa protectora de calor del Endeavour, causada porque una formación de espuma generada en el tanque de combustible golpeó contra el centro de la nave durante el despegue, necesitaría reparaciones antes del regreso del transbordador.
Luego de seis días de deliberaciones, el jueves decidió que la fractura de 7,6 centímetros no era una amenaza y no necesitaba trabajo de reparación.
El transbordador Columbia quedó destruido y 7 astronautas murieron en el 2003 debido a un corte en la capa protectora de calor, que se produjo cuando un pedazo de espuma golpeó un ala de la nave durante el despegue. El daño no se detectó y Columbia se desintegró poco tiempo antes de aterrizar.
La NASA quiere completar la construcción de la estación espacial para 2010, antes del retiro de la flota de transbordadores.
Laboratorios de Europa y Japón está previsto que sean instalados en diciembre y a principios del 2008 en el proyecto internacional de 100.000 millones dólares.