RIAD.- El conflicto entre dos mujeres sauditas casadas con un mismo hombre ha llegado al punto de enfrentarse a puñetazos, no por celos, sino porque cada una de ellas insistía en ser la donante de un riñón al marido enfermo.
Según informa hoy en su página web la televisión saudita "Al Arabiya", la pelea entre las dos mujeres comenzó después de que los médicos determinaran que el marido necesitaba ser sometido a un trasplante de un riñón.
Las dos mujeres se disputaron la donación y como el marido necesitaba un solo riñón, la única solución fue hacer un sorteo en el que "salió ganadora la que había compartido más vida con él".
La otra le donó sangre, explica la fuente, que no revela nombres.
La poligamia no es nada raro en sociedades islámicas conservadoras, sobre todo en la saudita.
El Islam permite al hombre casarse hasta con cuatro mujeres, siempre que el marido sea capaz de ser justo con todas ellas, lo que algunos líderes religiosos interpretan como un rechazo implícito de la poligamia.