LONDRES.- Camilla, duquesa de Cornualles, viajará al Mediterráneo sin la compañía de su esposo, Carlos de Inglaterra, tras haber tenido que excusar su asistencia al servicio religioso de mañana en memoria de la princesa de Gales, de cuya muerte en un accidente de tráfico en París se cumplen diez años.
Según fuentes citadas hoy por el vespertino "Evening Standard", Camilla aprovechará esos días para para tranquilizarse, después de haberse visto prácticamente obligada a ausentarse del acto del viernes por la polémica que el anuncio de su presencia había despertado en la opinión pública británica.
Muchos británicos no podían comprender que la mujer a la que siguen culpando del fracaso del matrimonio de Carlos y Diana por sus relaciones adúlteras con el heredero del trono, fuese a asistir a esa ceremonia junto a los hijos de la princesa.
Camilla había sido invitada a la ceremonia, que se celebrará en la Capilla de la Guardia Real, cerca del palacio de Buckingham, por los príncipes Guillermo y Enrique, y había aceptado, pero, tras el revuelo organizado y al parecer por consejo de la propia Reina, dio marcha atrás.
Camilla está supuestamente "furiosa", según el "Evening Standard", por la forma en que los ayudantes de su esposo han manejado todo el asunto y tiene ganas de irse al Mediterráneo con o sin Carlos.
La duquesa de Cornualles "se irá con unos amigos sin que se repare en gastos. El Príncipe de Gales no se unirá a ella", dijeron las mismas fuentes al periódico.
El pasado mayo, Camilla se marchó ya de vacaciones sin Carlos y pasó unos días a bordo del yate del multimillonario griego John Latsis.
Aunque Clarence House, la casa del príncipe de Gales, no da información sobre los planes de viaje de la familia, el vespertino señala que Camilla se quedará el viernes en Escocia, donde ha pasado todo el verano, tras lo cual se desplazará al Mediterráneo.
Según el periódico, su decisión de hacer ese viaje sin Carlos evidencia una "tensión" creciente entre la pareja.
El "Evening Standard" indica que Camilla, de 60 años, siente que los asesores de palacio la han dejado mal, al decir una y otra vez a la prensa que asistiría personalmente al servicio en recuerdo de Diana.
Según aquellas primeras informaciones, Camilla iba a ocupar la primera fila, junto a Carlos y sus hijos, Guillermo y Enrique, pero el pasado domingo por la tarde llegó un comunicado excusando su asistencia.
Camilla, agrega el periódico, sufrirá ahora "la ignominia" de tener que quedarse en Balmoral, residencia escocesa de Isabel II, mientras el resto de la familia real se traslada a Londres.
Isabel II y su esposo, el príncipe Felipe, viajan esta noche en el tren real a la capital, adonde llegarán mañana.
Desde el palacio de Buckingham se trasladarán al lugar donde se celebrará la ceremonia para regresar poco después de que termine a Escocia, esta vez en avión.