LIMA.- El costo de la reconstrucción de la infraestructura pública dañada por el terremoto que asoló Perú el pasado 15 de agosto ascenderá a 220.68 millones de dólares, según estimaciones publicadas hoy por el Ministerio de Economía peruano.
A través de un estudio macroeconómico actualizado al mes de agosto, el Ministerio indicó que ese dinero es el presupuestado para rehabilitar los numerosos centros educativos, hospitales, edificios, tramos de carretera y puentes afectados o destruidos por el sismo.
Dentro de ese presupuesto también entran los servicios básicos como electricidad, agua y teléfono, que fueron dañados en la zona del desastre.
El pasado día 15 de agosto un terremoto de 7.9 grados en la escala de Richter afectó duramente la costa central del país andino, causando 519 muertos y dejando más de 56 mil familias damnificadas. En la ciudad de Pisco, la más afectada por el temblor, quedaron destruidas casi todas las infraestructuras y cerca del 80 por ciento de sus edificios.
El informe del ministerio proyecta que para la recuperación de las viviendas se destinarán 30.61 millones de dólares. En esta cifra tan solo se ha considerado la subvención de 6 mil nuevos soles (unos dos mil dólares) ya anunciada por el Gobierno en los primeros días tras la catástrofe.
Para recuperar el saneamiento público se orientarán 49.64 millones de dólares hacia las ciudades de Pisco, Cañete, Ica y Chincha. Asimismo, también se destinarán 23.25 millones de dólares para la reconstrucción de la infraestructura eléctrica en la región.
En cuanto a las carreteras, éstas contarán con un presupuesto de 33 millones de dólares, mientras que los hospitales dispondrán de 15.19 millones para su recuperación.
El sistema educativo es el que más presupuesto recibirá para su recuperación, con un total de 68.99 millones de dólares.
Según el ministerio de Economía, estas pérdidas tendrán un impacto económico y social en todo el país, en particular en el departamento de Ica, el más afectado por el terremoto. En esta región el producto interno caerá un 6 por ciento este año, cifra que se reflejará en una reducción del 0.38 por ciento en el crecimiento de la economía peruana.
No obstante, el informe precisa que esta estimación no considera la posible reactivación del sector de la construcción y del sector público, que es probable que se disparen debido a los mayores gastos del Estado y a la reconstrucción de viviendas en la zona.