ARGEL.- Al menos 28 personas murieron y decenas resultaron heridas este sábado al detonar un automóvil cargado de explosivos en un cuartel de la Guardia Costera de Argelia, dijeron fuentes de un hospital.
La explosión -el segundo atentado en el país en menos de 48 horas- fue en el poblado costero de Dellys, en el norte del país y a unos 50 kilómetros (30 millas) de Argel.
La cifra de muertos fue subiendo durante el día, hasta llegar a 28, dijeron funcionarios de un hospital que pidieron no ser identificados pues carecían de autorización para hablar con periodistas. Algunos de los heridos se hallaban en grave estado.
Una ola reciente de ataques dinamiteros en Argelia ha generado temores de que regresen los hechos de violencia de la décadada del noventa, cuando murieron decenas de miles de personas, luego que el gobierno canceló comicios donde el partido islámico era favorito para triunfar.
El país, un aliado incondicional de Estados Unidos en la guerra contra el terrorismo, busca terminar con 15 años de insurgencia que mataron a 200.000 personas. Hasta hace poco, sus esfuerzos parecían exitosos.
El ataque tuvo lugar dos días después de otro atentado dinamitero en el que murieron al menos 22 personas en el este de Argelia. Las víctimas esperaban ver al presidente Abdelaziz Bouteflika, que visitaba la zona. Durante sus ocho años en el poder, Bouteflika se ha concentrado en terminar con la insurgencia.
Se creía que Bouteflika podría haber sido el blanco del ataque, aunque las autoridades no han efectuado declaraciones sobre eso. La policía dijo que los servicios de seguridad mataron al atacante después que arrojó los explosivos e intentó escapar.
Nadie se atribuyó la responsabilidad por ninguno de los dos ataques. Sin embargo, un grupo de milicianos relacionados con Al-Qaeda, que se autodenomina Al-Qaeda en el Norte de Africa Islámico, se ha mantenido activo en el país en los últimos meses. El ministro del Interior Noureddine Yazid Zerhouni advirtió el viernes a los terroristas que tienen "una opción: entregarse, o morir".
La insurgencia argelina estalló en 1992, después que el ejército canceló los comicios legislativos que un partido fundamentalista ahora proscrito se encaminaba a ganar.
Al-Qaeda en el Norte de Africa Islámico se proclamó responsable de otros ataques de este año, entre ellos un atentado suicida de abril frente a las oficinas del primer ministro en Argel y un ataque simultáneo contra una comisaría, en el que murieron 32 personas.
El grupo de milicianos también dijo que era responsable de otro atentado en julio, cuando un atacante suicida detonó un camión dentro de un complejo militar al sureste de la capital, matando a 10 soldados.