PEKIN.- Un periodista chino que fue encarcelado mientras trabajaba para el New York Times fue liberado el sábado, lo que puso fin a una controvertida condena de prisión que destacó el duro control del país sobre los medios de comunicación.
Zhao Yan, con una apariencia mucho más delgada, fue recibido a la salida de la prisión por un pequeño grupo de familiares y amigos, entre ellos su hija y su hermana.
"En estos tres años he extrañado mucho a mi familia, especialmente a mi bisabuela materna, quien ahora tiene más de 100 años", señaló Zhao en un comunicado escrito.
"Por esa razón, quiero algo de tiempo para reunirme con mi familia. Después de un tiempo corto, espero ver a muchos otros amigos y miembros de los medios de comunicación", sostuvo Zhao.
El periodista agregó que piensa realizar una declaración más extensa en la que se referirá a su visión del futuro cercano.
Zhao, quien informó sobre abusos oficiales, fue sentenciado a tres años en prisión por fraude en agosto del 2006, una acusación que él negó.
El reportero fue detenido en el 2004, por acusaciones que incluyen filtrar a los medios secretos de Estado después de que el Times informó que el ex presidente Jiang Zemin posiblemente renunciaría a su puesto como presidente de la Comisión Militar Central, lo que efectivamente hizo poco después.
Zhao fue acusado de informar al periódico sobre dichos de rivalidad entre Jiang y su sucesor, Hu Jintao. El Times ha dicho que esa acusación no tiene fundamentos.
"Siempre hemos dicho que Zhao Yan es un periodista honorable y trabajador cuya única ofensa parece ser haber practicado el periodismo", declaró Bill Keller, director ejecutivo del New York Times, en un comunicado.
"Esperamos que Zhao Yan, quien ha cumplido totalmente su condena de tres años, ahora pueda reanudar su vida y regresar a la profesión que escogió, sin restricciones", agregó.
Reporteros Sin Fronteras, un grupo con base en París que lucha contra las restricciones a los medios, dijo el viernes que deberían restaurarse todos los derechos de Zhao, incluido el derecho a trabajar como periodista.
China mantiene detenidos en prisión a 35 periodistas y 51 disidentes que han expresado su opinión en internet "sólo por ejercitar su derecho a informar", sostuvo el grupo.