TOKIO.- El partido gobernante de Japón estaba preparado para escoger a Yasuo Fukuda, quien busca mejores relaciones con sus vecinos asiáticos, como sucesor de Shinzo Abe en el cargo de Primer Ministro, en un esfuerzo por revivir la suerte del partido.
Varios sondeos de medios han mostrado que Fukuda tiene una buena ventaja sobre el ex ministro de Relaciones Exteriores Taro Aso en la elección dentro del partido.
Quien gane será virtualmente elegido Primer Ministro el martes, debido a la enorme mayoría del partido gobernante en la cámara baja del Parlamento.
Las principales facciones del Partido Liberal Democrático (PLD) han apoyado a Fukuda tras la decisión de Abe del 12 de septiembre de renunciar, con la esperanza de que el legislador de 71 años pueda traer estabilidad después de un año marcado por escándalos y una derrota electoral.
"Es natural que hayamos sido castigados por la gente", declaró el domingo Fukuda a NHK televisión, refiriéndose a la humillante derrota de julio en las elecciones de la cámara alta.
"Lo que debemos hacer es construir una a una medidas que puedan restituir la confianza de la gente", agregó.
El próximo líder de Japón enfrentará a un Parlamento dividido, con partidos combativos de la oposición en control de la cámara alta y con presiones para gastar más y atraer a los votantes mientras se controla la gigantesca deuda pública del país.
La situación han provocado temores de un estancamiento político en un momento en que Japón necesita tomar medidas en las reformas a las pensiones, impuestos y otros temas.
Críticos de Fukuda, jefe del gabinete bajo el Gobierno del popular Junichiro Koizumi, dicen que estará en deuda con la vieja guardia del PLD y retrasará importantes reformas económicas.