El Presidente ecuatoriano Rafael Correa celebró la victoria para la Asamblea Constituyente.
AFP
QUITO.- El Presidente de Ecuador, Rafael Correa, se adjudicó "un triunfo incuestionable" en la elección de hoy de la Asamblea que promueve para disolver el Congreso opositor y reformar la Constitución, al prever una mayoría con 80 de los 130 escaños en disputa.
"Esta ha sido una elección limpia, democrática, eficiente y transparente. (...) Las proyecciones son claras: la victoria de la ciudadanía es incuestionable", señaló Correa en una conferencia de prensa.
El gobierno había previsto inicialmente que conquistaría entre 66 y 72 del total de curules. Sin embargo, el mandatario aseguró que el oficialismo alcanzaría hasta 80 escaños, felicitando a sus candidatos por la denodada victoria.
"Aceptamos este triunfo con suma humildad y total responsabilidad", señaló el jefe de Estado, y agregó que tras ello se "sentará a dialogar con todos los grupos que sinceramente quieran sacar adelante al país".
Una encuesta a boca de urna anticipó que el gobierno alcanzó 55 curules, según resultados parciales divulgados por la consultora Investigaciones y Estudios cercana al Ejecutivo.
"Si las proyecciones son correctas posiblemente lleguemos a 80", insistió Correa dejando entrever que su movimiento tomará el control absoluto de la Constituyente.
Enfatizó en que no irá tras un "proyecto totalitario y peor (copiará) un proyecto extranjero" ante las críticas de la oposición que lo vincula con el proceso socialista de su colega y amigo venezolano, Hugo Chávez.
"Somos gente buena. No hay agendas ocultas y la comunidad internacional lo sabe, y por eso gozamos del respeto de la gran mayoría de países", añadió el mandatario.
Reiteró que cumplirá con "el mandato" del electorado, por lo que "el Congreso deberá ser disuelto o entrar en receso". "El Congreso no funcionará; no ha estado a la altura histórica del país", subrayó.
Según Correa, la Asamblea Constituyente "tendrá que ser un instrumento de acuerdo y consenso entre actores políticos y sociales".
"Buscamos un modelo de Estado que garantice a todos acceder en igualdad de condiciones al progreso (...) El pueblo ha vencido en la madre de todas las batallas y lo ha hecho en forma increíble y contundente", expresó.
En la campaña, el jefe de Estado anticipó que pondrá su cargo a disposición de la Asamblea y le pedirá al mismo tiempo que disuelva el Congreso, de mayoría opositora, por considerarlo "corrupto e incompetente".
Asimismo propuso un nuevo texto constitucional que refuerce el control estatal de la economía y recorte los poderes del Congreso para destituir presidentes.