LONDRES.- Numerosos pacientes británicos se ven obligados a pagar por el servicio dental, se quedan sin tratamiento o deciden sacarse ellos mismos sus dientes, debido a las fallas en el servicio estatal de dentistas, según un sondeo publicado hoy en Gran Bretaña.
La encuesta realizada a 5.200 pacientes del Servicio Nacional de Salud (NHS) concluyó que el 20 por ciento de los británicos se quedó sin tratamiento dental por los altos costos, en tanto que un seis por ciento decidieron tratarse ellos mismos.
La mayoría de los pacientes dentales que decidieron optar por un tratamiento privado justificaron esa decisión por la falta de servicios locales.
Por su parte el ministro de Salud, Ben Bradshaw, afirmó que aquellas personas que no logran hallar un dentista local del NHS deben visitar a su médico de cabecera para ser derivados.
Gran Bretaña cuenta con un pobre servicio de salud dental provisto por el estado, principalmente debido a la falta de dentistas calificados.
Entretanto, de los 750 dentistas consultados el 84 por ciento dijo que los nuevos contratos con el estado, que comenzaron en 2006, no han mejorado el servicio para los pacientes, mientras que un 58 por ciento dijo que el servicio empeoró desde entonces.
Un 25 por ciento de los pacientes entrevistados dijo que prefiere ir a dentistas privados, en tanto que el 15 por ciento afirmó que recibe mejor trato de especialistas del sector privado que del público.