MADRID.- Un nuevo estudio sobre el aceite de oliva demuestra que el consumo de este alimento reduce la muerte celular y la inflamación vascular que se produce en el organismo tras la ingesta de grasas, y reitera los beneficios de este producto sobre la salud humana.
La investigación, realizada por un equipo del Instituto de la Grasa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha demostrado in vitro que el aceite de oliva minimiza la muerte celular que se produce tras la absorción de grasas en el cuerpo humano, en la fase de la digestión.
Asimismo, el experimento reitera que el aceite de oliva reduce la respuesta inflamatoria vascular que también tiene lugar tras la absorción de grasas en la fase digestiva.
Los resultados de esta investigación podrían explicar casos de transtornos cardiovasculares en personas poco propensas a sufrir estas dolencias, según el director de la investigación, Francisco Muriana.
El estudio, publicado en la revista Journal of Nutrition, confirma que la ingesta de aceite de oliva, una grasa monoinsaturada, reduce los niveles de colesterol en la sangre en la fase digestiva, todo lo contrario de lo que ocurre con las grasas saturadas.