WASHINGTON/BEIJGING.- Pese a las reiteradas protestas chinas, el Presidente estadounidense, George W. Bush, se reunió hoy con el Dalai Lama en los salones privados del Mandatario en la Casa Blanca.
Fuentes en la oficina del Dalai Lama dijeron que las conversaciones entre ambas personalidades comenzaron brevemente después de las 17.00 GMT.
Pocas horas antes de la reunión de Bush con el líder religioso supremo del Tíbet, el portavoz del Ministerio de Exteriores en Beijging, Liu Jianchao, dijo que el encuentro se opone a "las normas básicas de las relaciones internacionales" y además hiere "el sentimiento de los chinos".
Pese a la advertencia, un portavoz de la Casa Blanca había anunciado que la reunión se celebraría tal como estaba prevista, aunque matizó que la visita no sería recibida en el Salón Oval sino en una dependencia privada, porque el Dalai Lama es un líder religioso, no político.
"Pedimos encarecidamente a Estados Unidos que corrija el error, que cancele los compromisos asumidos y que no vuelva a entrometerse en los asuntos internos de China", había advertido el portavoz chino.
La misma fuente confirmó que China anuló una reunión de alto nivel sobre el programa atómico iraní prevista para mañana miércoles en Berlín, por "razones técnicas". En las conversaciones se había convocado a los directores políticos de China, Alemania, Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos.
Beijging aseguró que esta cancelación no guarda relación con la recepción del Dalai Lama en Washington, como especuló el Departamento de Estado norteamericano.
El mes pasado y en disgusto porque el Dalai Lama fue recibido por la canciller alemana, Angela Merkel, China canceló una ronda de conversaciones con diplomáticos alemanes sobre derechos humanos, planeada para diciembre.
Este miércoles en Washington se le hará un homenaje al Dalai Lama, quien recibirá la medalla de oro del Congreso norteamericano, la máxima distinción de esa entidad para un civil.
Bush ya había recibido en tres ocasiones al Premio Nobel de la Paz exiliado en India, la última de ellas en noviembre de 2005. Beijging protestó en ese momento por la invitación de la Casa Blanca, recordó el portavoz, quien agregó que el Dalai Lama no es más que un "político exiliado" que en nombre de la religión intenta dividir a China.
Tropas de este último país ocuparon el Tíbet en 1951. Tras un levantamiento popular fallido en 1959, el Dalai Lama se exilió a India.