España es el país de la UE más tolerante con inmigrantes dice Felipe González

LIMA.- España es el país más tolerante de Europa y en ella no existe xenofobia hacia los inmigrantes extranjeros, a pesar de la agresión sufrida por una joven ecuatoriana en el metro de Barcelona, dijo el martes en Lima el ex presidente del gobierno español Felipe González

"En España no hay un problema de rechazo o de xenofobia, hay algunos epifenómenos que tienen que ver, y eso es lo que más me molesta, con algo que les reclamo a mis conciudadanos: no perder la memoria", señaló González a la prensa tras reunirse con el presidente Alan García.

"Lo que ha pasado con esa chica adolescente ecuatoriana es algo que socialmente me duele", admitió el ex gobernante, que dirigió España de 1982 a 1996.

"Entre los países de la Unión Europea, España sigue siendo el país de acogida más tolerante que ningún otro, en términos de absorción e integración", acotó González. "Defiendo algo que quiero que comprendan: todavía España es el país de acogida con menos zonas de rozamiento de todos los que conozco en Europa".

Hace 25 años "España era un país de emigrantes, no de inmigrantes. Por razones políticas lo único que sabíamos exportar no era inversiones sino capital humano, gente que tenía que buscarse la vida fuera de nuestras fronteras", dijo el dirigente histórico del PSOE.

"Por tanto reclamo la memoria histórica para mis conciudadanos, porque no hay ninguna familia en España, desde la clase media para abajo que no conozca la emigración por razones económicas o por otras razones, incluida la piel", señaló.

"También les reclamo a los españoles que no tengan mentalidad de nuevos ricos: ni cuando están allí (en España) ni cuando vienen aquí (a América Latina", afirmó el ex presidente. "También debo decir que en 10 años aumentó en España la población en 4 millones respecto de 40 millones: es pura inmigración".

La feroz agresión fue registrada por una cámara de seguridad cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo. El hecho se registró el 7 de octubre, cuando el joven español Sergi Javier Martí Martínez, de 21 años, golpeó y pateó en el rostro a una joven ecuatoriana de 16 años.

El pasado jueves un juez catalán dejó en libertad sin fianza al agresor, aunque bajo una serie de medidas para mantenerlo controlado.