ANKARA.- El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, prometió hoy en la cumbre de Estambul cooperar con Turquía en su lucha contra los insurgentes kurdos del norte de Irak y anunció que su gobierno reforzará las medidas contra el ilegalizado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
"Hemos tomado la decisión clara de cerrar los campamentos del PKK en el norte de Irak", dijo Al Maliki en la conferencia internacional, que arrancó esta mañana. "Tomaremos duras medidas contra el PKK".
No obstante, no quedó claro cómo gestionará Al Maliki esas medidas, ya que el gobierno central tiene escaso poder en la región autónoma del norte de Irak, gobernada por el gobierno autónomo del Kurdistán.
En cuanto a la situación de la seguridad en Irak, Al Maliki señaló que se ha superado "una fase peligrosa" y afirmó que la situación hoy "es mejor que hace seis meses", pese a los atentados que diariamente causan numerosas muertes.
La conferencia de Estambul, que tenía como objetivo analizar la situación interna de Irak, se ha visto ensombrecida por la amenaza turca de emprender una ofensiva militar a gran escala contra el PKK en el norte de Irak.
Turquía ha desplegado ya a sus tropas en la frontera con el país mesopotámico y ha dejado claro que está dispuesta a actuar de forma unilateral si Estadso Unidos e Irak no logran negociar con los insurgentes kurdos.
"Se acabó el timepo de las palabras, es hora de actuar", dijo el ministro turco del Exterior, Ali Babacan, tras reunirse el viernes con la secretaria de estado norteamericana, Condoleezza Rice.
Rice, declaró que cualquier medida debe estar sujeta a la estabilidad en el Kurdistán. En la cumbre participan también países vecinos de Irak, las Naciones Unidas y la Unión Europea.