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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 14:52
NUEVA YORK.- Un adolescente murió entre una lluvia de 20 balas disparadas por los policías que pensaron que él estaba amenazándolos con un arma, informaron hoy las autoridades. El objeto resultó ser un cepillo para el cabello.
Un operador del servicio de urgencias 911 oyó el al joven gritar que él tenía un arma, aseguró la policía.
El caso, no obstante, evocó recuerdos dolorosos de tiroteos policiales anteriores, como el de noviembre de 2006, cuando Sean Bell, desarmado, murió de 50 disparos el mismo día de su boda. Los residentes recuerdan también el caso del inmigrante africano desarmado Amadou Diallo, quien en 1999 fue alcanzado por 19 de las 41 balas disparadas por la policía en el barrio neoyorquino de Bronx.
"Las circunstancias de cómo ocurrió están bajo investigación a estas alturas y ustedes pueden estar seguros de que tomaremos esto muy en serio", afirmó el alcalde Michael Bloomberg.
La policía recibió una llamada de la madre del adolescente alrededor de las 19:00 horas locales del lunes, dijo el vocero policial Paul Browne. El operador que recibió la llamada dijo que pudo oír al fondo al adolescente, gritando que tenía un arma, agregó Browne.
Cuando los agentes llegaron al lugar, en un edificio en Brooklyn, pudieron ver a Khiel Coppin, de 18 años, caminando dentro del departamento en la planta baja. Su madre estaba afuera.
La madre del adolescente había intentado llevarlo a un hospital antes el mismo día, afirmó Browne. Dijo que el adolescente tenía antecedentes de enfermedad mental.
Desde el interior de la vivienda el adolescente empezó a gritarle a su madre y a los policías, antes de salir por una ventana y dirigirse hacia los agentes sosteniendo un objeto negro en su mano, dijo la policía.
Los agentes le pidieron que se detuviera, pero abrieron fuego cuando el adolescente se negó y siguió acercándose, aseguró Browne.
La policía dijo que no supo de inmediato cuántas de las 20 balas alcanzaron a Coppin, quien fue declarado muerto en un hospital.
Los investigadores descubrieron después que el objeto que portaba el joven era un cepillo para el cabello, dijo Browne.
