Ciclón "Sidr" deja al menos 425 víctimas en Bangladesh

DACCA.- El ciclón "Sidr" azotó hoy la costa de Bangladesh causando la muerte de por lo menos 425 personas, arrasando casas y forzando el desalojo de unos 650.000 habitantes, informó la agencia Noticias Unidas de Bangladesh.

Mientras el gobierno estima que el ciclón mató a 242 personas, la agencia noticiosa -que tiene reporteros en toda la región- indicó que efectuó su propio conteo de víctimas en cada uno de los distritos afectados.

El gobierno ha admitido problemas para contabilizar el número de personas fallecidas. El área de control de desastres de Dacca intenta recoger información, pero se enfrenta con las dificultades causadas por los tendidos eléctricos y de teléfonos caídos en la mayoría de las áreas remotas.

Dalil Uddin, funcionario del Ministerio de Administración de Desastres, dijo que la cantidad oficial de muertos también será mucho mayor a 242.

La mayoría de las personas falleció debido a la caída de objetos, de acuerdo con Nahid Sultana, funcionario de la Oficina de Control de Ciclones.

Las precipitaciones y los vendavales provocaron marejadas de 1,2 metros de alto, que inundaron las áreas bajas y algunas islas, expresó Sultana.

Las áreas más afectadas eran las comunidades del sur de Bangladesh, donde la mayor parte de las víctimas murió al caer árboles o escombros. Otras personas se ahogaron al volcar sus embarcaciones, dijo.

Las cuadrillas de emergencia intentaban llevar ayuda a las áreas devastadas por la tormenta.

El ciclón derribó miles de casas precarias, arrancó árboles, tiró al suelo postes de electricidad y teléfono, y destruyó plantaciones agrícolas y criaderos de peces en 15 distritos costeros, dijeron funcionarios del gobierno y testigos.

Los equipos del gobierno procuraban también entregar alimentos y medicinas, dijo Hasanul Amin, del Programa de Preparativos para Ciclones.

El fenómeno climático llegó con vientos de 240 kilómetros por hora antes de enfilar tierra adentro y perder potencia. "Sidr" se debilitó y se convirtió en una tormenta tropical, con vientos de 60 kilómetros por hora.