LONDRES.- El científico que creó la oveja clonada Dolly, Ian Wilmut, dejará sus trabajos de clonación para centrarse en una nueva técnica revolucionaria que permite crear células madre sin usar embriones, afirma hoy el diario “The Daily Telegraph.”
Según pudo saber el periódico británico, Wilmut abandonará el método de la clonación para encontrar otra forma de curar enfermedades como el mal de Parkinson.
El científico, de la Universidad de Edimburgo (Escocia), cree que un procedimiento desarrollado en Japón ofrece una mejor opción de desarrollar las células del mismo paciente para tratar males como las apoplejías o los problemas cardíacos.
A diferencia de las actuales investigaciones con células madre, la nueva técnica no necesita el uso de embriones humanos.
En los últimos diez años, los científicos han afrontado fuertes críticas de grupos religiosos y organizaciones “pro-vida” debido a la necesidad de usar embriones para crear células madre.
En Estados Unidos, el presidente George W. Bush ha prohibido el uso de dinero público para investigaciones de este tipo.
La decisión de Wilmut, agrega el rotativo, puede poner fin a la clonación terapéutica, una área de investigación muy importante en los últimos años y en la que se ha invertido mucho dinero.
"He decidido hace unas semanas no seguir con la transferencia nuclear (el método utilizado para clonar a Dolly),” dijo Wilmut, quien cree que “será más fácil” que la nueva técnica sea aceptada socialmente.
El equipo de Wilmut sorprendió al mundo en 1997 cuando presentó a Dolly, el primer animal en ser clonado con una célula adulta.Wilmut señaló que está inspirado en un trabajo del profesor Shinya Yamanaka, de la Universidad de Kioto, que investiga en la creación de células madre de un paciente sin necesidad de embriones.
En anteriores investigaciones, Yamanaka encontró la manera de crear células madre de fragmentos de piel.
El diario “The Daily Telegraph” agrega que fuentes de la comunidad científica consideran que el profesor japonés ha conseguido hacer lo mismo con células humanas.
Si bien los detalles de esos estudios aún tienen que ser divulgados, el profesor Wilmut lo considera “extremadamente estimulante y asombroso,” una opinión compartida por otros expertos.
Martin Evans, premio Nobel de Medicina de este año, cree que esta investigación “será la solución a largo plazo,” mientras que Robin Lovell-Badge, del Instituto Nacional de Investigación Médica de Mill Hill (norte de Londres) considera que esto será “el futuro.”