VANCOUVER.- Una nueva muerte que podría estar ligada al uso de pistolas eléctricas por la policía se produjo el sábado en Canadá, la tercera desde el fallecimiento en octubre de un inmigrante polaco con repercusiones internacionales.
Un hombre de 36 años, Robert Knipstrom, murió el sábado en un hospital de la provincia de Columbia Británica, cinco días después del altercado con agentes de la policía.
El incidente se produjo el lunes en un centro comercial de Chilliwack, 100 kms. al este de Vancouver, la metrópolis de la costa pacífica canadiense.
Knipstrom fue hospitalizado tras ser interpelado. Fue abierta una investigación para determinar las causas exactas de su muerte.
El 14 de octubre, el inmigrante polaco de 40 años Robert Dziekanski murió en el aeropuerto de Vancouver tras recibir al menos dos descargas de la pistola eléctrica Taser.
El video de un pasajero, que muestra la intervención de cuatro policías y los últimos momentos de Dziekanski, que no parecía oponer resistencia, dio la vuelta al mundo provocando conmoción e indignación, especialmente en Polonia y Canadá.