LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó hoy al gobernador opositor del departamento amazónico de Pando, Leopoldo Fernández, de organizar grupos que robaron y golpearon a una prima suya para meterle miedo a él, aunque una dirigente cívica de la región rechazó la denuncia.
"Ayer en Cobija, Pando, (Fernández) les hace robar, golpear y pegar a mi prima. Si a la familia del presidente le hacen eso, yo me pregunto qué será con los familiares de los dirigentes sindicales que están trabajando y luchando contra un modelo económico que ha hecho tanto daño", dijo Morales durante un discurso en La Paz.
Cobija, la capital de Pando, vivió el martes un paro y movilizaciones callejeras que precedieron a la huelga que realizan hoy seis departamentos, incluido ese, para rechazar el proyecto de Constitución de Morales y una ley para pagar una renta de vejez, aprobados ambos al margen de la oposición.
La presidenta del Comité Cívico de Pando, Ana Melena, dijo hoy a Efe que desconoce esas supuestas agresiones sufridas durante las protestas e insistió en que fue una movilización pacífica, mientras que no fue posible contactar al prefecto (gobernador) Fernández.
El mandatario señaló que las agresiones sufridas por su prima seguramente fueron cometidas para asustarlo y meterle miedo a él, con el propósito de que abandone su “lucha” debido a la presión sobre sus familiares.
"No vamos a asustarnos, no tenemos ningún miedo", aseguró Morales, durante un discurso que pronunció esta mañana ante los campesinos leales a su administración que se reunieron a las puertas de palacio de Gobierno en La Paz.
Recordó que en el 2002, durante la administración del presidente Jorge Quiroga, actual líder del mayor partido opositor, Fernández era ministro de Gobierno e hizo detener a los dos hermanos que Morales tiene en la ciudad andina de Oruro, en medio de unas protestas.
El mandatario situó la denuncia por las agresiones contra su prima en el marco de otras sufridas por constituyentes oficialistas en Sucre y atentados con dinamita de muy baja potencia contra el consulado de Venezuela y una residencia de médicos cubanos en la ciudad oriental de Santa Cruz, ocurridos en pasadas semanas.