RIO DE JANEIRO.- El presidente brasileño, Luiz Lula da Silva, comenzó a discutir en los últimos días su futuro político con un selecto grupo de interlocutores, a quienes manifestó su intención de ser "senador" de su estado natal, Pernambuco, luego de dejar el máximo cargo de la República, reportó la revista IstoE.
Para poder disputar un lugar en el Legislativo, Lula da Silva "sabe" que será necesario licenciarse de la Presidencia en abril de 2010, meses antes del final de su segundo mandato, que llega hasta diciembre de ese año.
Pero de acuerdo a la última edición de IstoE, Lula no tiene problemas, según adelantó a sus interlocutores más cercanos, y esa licencia le permitirá entrar en la campaña electoral presidencial, para contar con un sucesor de su confianza.
En la actualidad, la predilección de Lula recae en el nombre de la ministra de Casa Civil, Dilma Rousseff, quien ya adelantó que en ese caso sólo permanecerá en el Palacio del Planalto, sede del gobierno, cuatro años, hasta 2014.
Según la fuente, el presidente brasileño adelantó sus planes a por lo menos tres personas, en las últimas semanas. "Están hablando mucho de ese asunto de un tercer mandato, pero lo que nadie dice es que puedo disputar un puesto en el Senado", dijo Lula a uno de sus interlocutores en el Planalto.
Y a un consejero político y económico, el presidente adelantó que, en esa dirección, "Pernambuco (noreste de Brasil), es una posibilidad". El proyecto en cuestión, siempre de acuerdo a la revista, también fue presentado al jefe de gabinete Gilberto Carvalho, quien tuvo la misión de difundir la idea a "selectos integrantes" del gobierno y el Congreso.
En Pernambuco, uno de los estados más pobres del país, Lula da Silva entiende que puede vencer con amplia ventaja la disputa electoral, ya que en los últimos comicios en 2006, obtuvo un apoyo del 70,9 por ciento de los votos válidos, y su nivel de popularidad actual ronda el 80 por ciento.
"Es un razonamiento correcto. Pernambuco es uno de los mayores estados de la región y donde los programas sociales del gobierno tienen un impacto muy fuerte", comentó el cientista político Ricardo Guedes, del Instituto Sensus.
La idea fue bien recibida por uno de los partidos aliados del gobierno, el Movimiento Democrático Brasileño, cuyo líder en la Cámara, diputado Henrique Aves, destacó que "Lula en el Senado es una alternativa y sería muy bueno tanto para el Congreso como para el Noreste".