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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 23:47
JERUSALÉN.- El bloqueo impuesto por Israel en la franja de Gaza desde que el grupo islámico Hamas se hizo con el total control de esta región, el pasado junio, corre el riesgo de provocar "daños irreparables" en la economía de este territorio, advirtió la ONU hoy viernes.
Este grito de alarma se produce cinco días después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertara de la trágica situación sanitaria en la franja, una región de 362 km2 donde se hacinan casi 1,5 millones de palestinos, en medio de una gran pobreza y completamente aislados del resto del mundo.
"El aislamiento total de la franja de Gaza que dura desde hace seis meses puede provocar en la economía local daños irreparables y hace a su población todavía más dependiente de la ayuda exterior", alerta la Oficina de Coordinación de asuntos humanitarios de la ONU.
El "bajo nivel de las reservas de alimentos, el alza de los precios, el aumento del desempleo y la pérdida de ingresos tienen un efecto devastador", según este informe.
La ONU considera que "si el bloqueo no se suaviza, habrá que aumentar de forma sustancial las ayudas ya entregadas al 80% de la población" de Gaza.
El informe recuerda que decenas de pequeñas empresas se han declarado en quiebra, sobre todo en el sector de la construcción debido a que la inmensa mayoría de proyectos se paralizaron por falta de materiales.
En total, las pérdidas en el modesto sector industrial de Gaza, que comprende desde los muebles hasta la ropa o los alimentos, cuya producción se destina, en un 75%, a Israel o a Cisjordania, alcanzaron sólo en septiembre los 110 millones de dólares, según estas fuentes.
Los organismos multilaterales se preocupan además por las restricciones de carburante impuestas por Israel, que afectan por ejemplo a los hospitales, y por el acceso limitado de los enfermos graves a un médico fuera de la franja.
El jueves, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) consideró que la población palestina se convirtió en un "rehén del conflicto" con Israel.
La franja de Gaza es considerada una "entidad hostil" por el Estado hebreo, que limita el suministro de combustible y restringe al máximo el tráfico comercial.
Israel, que retiró sus colonias de Gaza en 2005, sigue controlando sin embargo su espacio aéreo, las aguas territoriales y las puertas de entrada y salida de la franja.
