SAO PAULO.- Alentado por la ONU a ser un mediador entre el mandatario Evo Morales y la oposición boliviana, el presidente de Brasil, Luiz Lula da Silva, llegará este sábado a Bolivia, para firmar una serie de tratados bilaterales y un acuerdo para una carretera que unirá el Pacífico chileno con el Atlántico brasileño.
El presidente Lula, según anunció su portavoz, Marcelo Baumbach, descartó un aumento de su seguridad personal para el viaje a Bolivia, al ser consultado sobre el temor generado por el aumento de la tensión política que se registra en el país andino.
La visita de Lula a Morales, según el relator especial de la ONU para Asuntos Indígenas, el mexicano Rodolfo Stavenhagen, deberá servir para buscar una salida al conflicto político boliviano a raíz de las reformas impulsadas por Morales y la amenaza de secesión por parte de gobernadores opositores.
"Personalmente creo que el presidente Lula necesita actuar inmediatamente, ya sea hablando con Morales y las autoridades o apuntando posibles soluciones", afirmó Stavenghagen a la prensa brasileña desde Ginebra.
Según el relator especial de la ONU, "Brasil debería tener todo el interés en tener a su vecino en paz. Lula debe aprovechar su buena relación con Morales para intentar mediar y encontrar una solución".
Bolivia es el principal proveedor de gas de Brasil, al que indemnizó por haber nacionalizado dos refinerías de la estatal Petrobras, que tiene previsto nuevas inversiones en el país vecino para cubrir su matriz energética, sobre todo la de la industria de San Pablo.
Para el relator de la ONU, es necesario encontrar "un equilibrio entre tener una Bolivia en paz social y los intereses de Brasil en el tema del gas". Stavenhagen, quien estuvo en Bolivia, dijo que sectores de la elite boliviana están saliendo hacia centros urbanos brasileños, además del conocido flujo de trabajadores ilegales empleados en las industrias de Sao Paulo.
La visita de Lula, según su portavoz, no tendrá un operativo de seguridad especial, como especularon los principales diarios brasileños. "No existe nada, por el momento, que apunte sobre la necesidad de alguna precaución especial o necesidad de cancelar el viaje. Lula irá a Bolivia con la seguridad para la realización de esa visita", afirmó Baumbach a periodistas.