WASHINGTON.- La Casa Blanca recibió hoy con beneplácito la decisión del rey Abdalá de Arabia Saudita de indultar a una joven víctima de una violación colectiva que había sido condenada a seis meses de cárcel y a 200 latigazos.
"Se trata de una decisión que el rey Abdalá debía adoptar en nombre de Arabia Saudita, y pensamos que es la decisión correcta", declaró a la prensa la portavoz del Presidente George W. Bush, Dana Perino.
"Estamos contentos" de que se haya otorgado el indulto, indicó por su parte un portavoz del Departamento de Estado, Tom Casey. "Todos se habían asombrado ante la sentencia inicial y esperan que esto cierre el caso", añadió.
Sumándose a las críticas de numerosas organizaciones, el presidente estadounidense George W. Bush había declarado a principios de diciembre que estaba "encolerizado" por ver cómo un país no se ponía de parte de la víctima de una violación.
Añadió que Estados Unidos había transmitido "claramente" lo que pensaba al rey Abdalá, uno de los grandes aliados de Estados Unidos.
A pesar de ser violada por un grupo de siete hombres, la mujer, cuya identidad no fue revelada, había sido condenada en octubre de 2006 a 90 latigazos por estar en un coche en compañía de un "desconocido".
Esta condena se convirtió en 200 latigazos y seis meses de cárcel el 14 de noviembre, durante una revisión del fallo en primera instancia.
Arabia Saudita se rige por los principios wahabitas, una interpretación muy estricta de la Sharia (ley islámica), según la cual, las mujeres no tienen derecho a conducir, no deben estar en presencia de hombres ajenos a la familia y, en público, deben cubrirse de la cabeza a los pies.