BOGOTÁ.- Dos soldados del Ejército cumplieron hoy viernes diez años en poder de la guerrilla de las FARC como los secuestrados más antiguos del país.
Los suboficiales Libio José Martínez Estrada y Pablo Emilio Moncayo Cabrera fueron secuestrados el 21 de diciembre de 1997 en un asalto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, a una estación de comunicaciones del Ejército en Patascoy, a unos 490 kilómetros al suroeste de Bogotá.
En esa acción, murieron 10 soldados, cuatro fueron heridos y 18 secuestrados, de ellos 16 fueron liberados el 28 de junio de 2001.
El Presidente Álvaro Uribe en un discurso ante soldados discapacitados aseguró que "hoy, ya es mas difícil que se repita un Patascoy. Por eso no podemos echar atrás".
Gustavo Moncayo, padre de Pablo Emilio se encuentra en San Cristóbal, Venezuela, en una marcha a pie que cumple hacia Caracas, para llamar la atención de la comunidad internacional sobre el secuestro de su hijo.
"Son diez años en que se nos ha ido la vida, diez años de desilusiones por tantos momentos en que hemos esperado el feliz retorno", dijo Moncayo en San Cristóbal al telenoticiero Caracol.
José Fidencio Martínez, padre de Libio, precisó al mismo telenoticiero que ha sido muy difícil la vida para él sin saber nada de su hijo en la selva.
Johann Estiven Martínez, quien nació poco después del secuestro de Libio, en una carta de navidad dirigida a su padre expresó: "Pido a Dios que esta navidad pueda pasarla contigo para poder darte un fuerte abrazo, cerrar mis ojos y al despertarme encontrarte junto a mi".
El comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla, en un comunicado a la prensa resaltó la "entereza moral" los dos suboficiales quienes "han soportado la dureza del secuestro al que inhumanamente han sido sometidos por la organización terrorista FARC".